SANTO DOMINGO, República Dominicana.- El CAID, una iniciativa de la primera dama, Cándida Montilla de Medina, se ha convertido en un referente regional por sus servicios en favor de niños y niñas con autismo, síndrome de Down y parálisis cerebral.
El reconocimiento del Conadis, en colaboración con el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), fue recibido por Mayra Ramos, encargada de Servicios de Salud del CAID Santo Domingo Oeste, quien estuvo acompañada de Natalia Aquino, encargada de Programa de Entrenamiento a Familias.
También por Fernando Quiroz, director de comunicación, y Danelly Hernández y Michel Encarnación, especialistas de Planificación y Desarrollo del Despacho de la Primera Dama (DPD), destacó una nota de esa entidad gubernamental.
Además de Santo Domingo Oeste, el CAID tiene en funcionamiento sedes en Santiago y San Juan, y está en construcción sus instalaciones en Santo Domingo Este, como una manera de ampliar las políticas de inclusión del Gobierno del presidente Danilo Medina.
Es el primer centro público que se dedica a la evaluación, diagnóstico y la rehabilitación de niños y niñas de cero a diez años con esas tres condiciones, para mejorar su calidad de vida y la de su red familiar y social.
Reúne diecinueve servicios en un solo lugar, siendo el centro con la tecnología aplicada más avanzada en toda Latinoamérica y la región del Caribe. Cuenta con protocolos clínicos actualizados según los más altos estándares de calidad internacional, se lee en su página web.
Trastorno del Espectro Autista, parálisis cerebral y Síndrome de Down
El CAID informó el 5 de octubre último que de abril a junio de 2018, un total de 307 niños y niñas de familias de escasos recursos económicos habían sido atendidos en unas jornadas de evaluación auditiva y oftalmológica.
De esos 307 menores, 142 han sido diagnosticados con Trastorno del Espectro Autista, 65 con parálisis cerebral y 48 con Síndrome de Down. Otros 52 de los niños evaluados presentaron otros diagnósticos que no se corresponden a las áreas de trabajo del centro.
Los resultados mostraron que en más de un 50% los niños y niñas con diagnóstico de parálisis cerebral y Síndrome de Down presentan afecciones oftalmológicas que demandan tratamiento y seguimiento regular.
A 27 se les indicados lentes correctivos y 11 fueron referidos a neurocirugía y cirugía de estrabismo.
Los menores con autismo presentaron en un 73% resultados oftalmológicos dentro de los límites normales. No obstante, a 15 de ellos les fueron indicados lentes correctivos.
La valoración auditiva, a su vez, reportó en la mayoría de estos niños y niñas resultados dentro de los límites normales.
Sin embargo, 28 de ellos con alguna de las tres condiciones fueron referidos a Potenciales Evocados (estudios más profundos) y 11 deberán repetir las otoemisiones acústicas para completar el proceso.
Con estas evaluaciones, no solo se logró que los beneficiarios del CAID obtuvieran un diagnóstico definitivo que les permita dar inicio a su abordaje terapéutico personalizado sino que, además, se les dotó de lentes correctivos garantizándole un mayor éxito en el tratamiento de su condición.
Estas jornadas se traducen en un impacto positivo en el aspecto económico para las familias por el costo que suponen estos servicios especializados en el sector privado de la medicina.