SANTO DOMINGO, República Dominicana.-El politólogo Daniel Pou Suazo afirmó este domingo que una de las causas principales de que la República Dominicana esté entre los países con mayor percepción de inseguridad, es la falta de confianza de los ciudadanos en la Policía Nacional, pues a su juicio, más que sentirse protegidos, la sola presencia policial hace que las personas se sientan amenazadas.

Sostuvo que es por eso que en el país hay tantos subregistros en las estadísticas delictivas, ya que la gente evita ir a poner denuncias, involucrarse en temas con la Policía, porque al final de cuentas todo el mundo considera que sale perdiendo en cualquier tipo de relación con la  institución del orden.

"Esto se debe a que la Policía, desde hace mucho tiempo, ha desempeñado un papel disfuncional en torno a su misión como institución", precisó.

Entrevistado en el programa Toque Final, que cada domingo dirige el periodista Julio Martínez Pozo, por Antena Latina, canal 7, Pou explicó que la Policía se ve más a ella misma como un poder por encima de la sociedad, que un poder para estar al servicio de la sociedad.

Explicó que a causa de esa situación de la Policía, se producen situaciones que la hacen disfuncional y que obliga a que el ciudadano en lugar de sentirse protegido por esa institución, se sienta amenazado.

El politólogo consideró que la situación de desconfianza en la Policía no se revierte con leyes, sino con políticas de Estado.

Consideró que la principal política para esos fines consiste en establecer controles efectivos dentro de la Policía, pero no controles de la propia institución, sino controles externos.

"Vemos que el modelo de controles que tenemos hasta ahora, donde el encargado del departamento que debería controlar y transparentar la acción policial es un subalterno del jefe de la Policía, y realmente no es posible llegar a buen puerto cuando quien tiene que garantizar la transparencia y el control de la institución es un subalterno del jefe, que muchas veces es disfuncional con respecto a los intereses de la población. Hay un tema de políticas públicas y de necesidades que son impostergables, no hay posibilidad de tener éxito en la prevención y en la persecución del  delito si la ciudadanía no se siente confiada en la Policía", manifestó Pou.

El especialista en políticas públicas de seguridad ciudadana ve necesario dignificar la carrera policial, no tan solo los sueldos, sino la formación del agente, dar garantías dentro de la Policía a través de mecanismos de control y supervisión de la calidad del servicio; y sobre todo que sea convertida en una Policía que se sienta cónsona al lado de la ciudadanía.

Indicó además,  que es prioritario hacer que la institución del orden sea atractiva para los jóvenes progresistas con formación, porque la Policía integra la marginalidad, la gente con menos formación, con menos posibilidades, aunque hay oficiales brillantes, gente con calidad de servicio, muchas veces sin tener la calidad de la formación adecuada, con vocación para servir.

"Tenemos una Policía que cuenta con 34 mil efectivos en nómina, pero todo el mundo sabe que más del 25% de esos 34 mil no está en funciones propias de la Policía. Muchos de los beneficiarios de los ascensos, sobre todo rangos medios de oficial teniente, capitán y mayor, a quienes benefician es a individuos que se encuentran dentro de un estado de servidumbre dentro de la Policía, y digo estado de servidumbre porque no son policías es términos funcionales, están sirviendo  a funcionarios públicos, a empleados privados, a comunicadores, a dueños de bancas de apuesta, a dueños de prostíbulos, ect", expresó.

Dijo que el país debe tener una Policía en la real dimensión, y que si para dignificar la institución hay que reducirla a 15 mil miembros, así debe hacerse, y que con el dinero que se les pagaba a esas personas que no están en funciones policiales dignificar el nivel y la calidad de vida de los efectivos que sí están dispuestos a ejercer sus funciones correctamente.

Argumentó que la solución de la Policía no debe ser negociada, debe ser una solución política con el apoyo del Presidente de la República, ´La Policía no puede seguir siendo un pastel que se distribuye en sectores de poder, tiene que ser una institución digna, que le sirva a la sociedad, que sea garante del estado social y democrático de derecho´.

Daniel Pou dijo que la simple y sola reforma de la Policía no es suficiente, pues entiende que debe estar incorporada dentro de una política de seguridad pública y una política criminal del Estado dominicano.