SANTO DOMINGO, República Dominicana.- El exministro de Salud Pública Plutarco Arias afirmó este martes que salió del cargo "con la frente en alto y la mano limpia", además de asegurar contar con el "cariño" y la "admiración" del presidente Luis Abinader, quien lo destituyó la noche del viernes.
Arias emitió sus declaraciones durante una reunión con su sustituto, Daniel Rivera, y otros altos cargos del Ministerio de Salud Pública, según informó la institución en nota de prensa.
"Todos los directores cumplieron la meta de los seis meses, me voy con la satisfacción del deber cumplido, con la frente en alto y la mano limpia, me voy con el cariño y admiración del presidente Abinader", dijo el exfuncionario.
De acuerdo a Arias, su gestión realizó un "buen trabajo contra la covid-19.
"Trabajamos para que el turismo se mantenga activo y el apoyo del presidente fue fundamental para que todo esto se lograra al igual que la vicepresidenta Raquel Peña", expuso Arias, designado en el cargo el 16 de agosto pasado, el día de la jura de Abinader.
El objetivo de la reunión, aseguró la información, fue presentar formalmente al nuevo titular de Salud Pública y poner a su disposición el "esfuerzo y buenas acciones del personal del ministerio", a fin de cumplir con lo dispuesto por el presidente Luis Abinader "de priorizar la salud" en la República Dominicana.
La salida de Arias del Ministerio se produjo cinco días después de la polémica desatada por el proceso de licitación para comprar las jeringuillas destinadas al plan nacional de vacunación contra el coronavirus, que fue cancelado después de una denuncia por una supuesta sobrevaluación.
La licitación, que fue suspendida un día después tras la denuncia, era para adquirir 25,8 millones de jeringuillas a un costo global de 646,9 millones de pesos.
La misma noche de su destitución, Arias publicó un comunicado en Twitter en el que denunció que hay "diversos sectores interesados en repartirse el presupuesto del Ministerio de Salud".
Estos sectores, que no identificó, "han desatado una andanada de mentiras, críticas, extorsiones y chantajes, con la finalidad de distorsionar mi labor esforzada, recta y transparente en la conducción del ministerio".