Madrid, Madrid, (EFE).- Un juez español pidió este miércoles al Tribunal Supremo que investigue al vicepresidente segundo del Gobierno, el izquierdista Pablo Iglesias, por descubrimiento o revelación de secretos, con agravante de género, daños informáticos, y acusación o denuncia falsa y/o simulación de delito.
La petición del magistrado Manuel García Castellón, de la Audiencia Nacional, está relacionada con el robo a finales de 2015 de un teléfono celular de Dina Bouselham, exasesora de Iglesias, que es líder del partido Podemos y gobierna en coalición con el jefe del Ejecutivo español, el socialista Pedro Sánchez.
El juez decidió elevar el caso al Tribunal Supremo español por tratarse de un cargo público aforado judicialmente, y menciona a otros miembros de Podemos también implicados presuntamente, como la vicepresidenta cuarta del Congreso, Gloria Elizo, y Bouselhan y su pareja, Ricardo Dasaferreira, estos dos últimos por falso testimonio.
García Castellón relata que, bajo las instrucciones dadas por Iglesias, se presentó la desaparición del teléfono de Bouselhan como "un encargo" del Gobierno del conservador Mariano Rajoy (2011-2018) a un antiguo comisario, José Villarejo, que cumple actualmente prisión provisional por varios casos de corrupción, y como parte de una campaña para "perjudicar" al líder izquierdista y a su partido.
El magistrado considera que Iglesias usó de forma fraudulenta este proceso para intentar lograr algún tipo de ventaja electoral en los comicios generales de abril de 2019, cuando el líder de Podemos responsabilizaba del caso a las "cloacas" del Estado.
El juez cree que se trata de una "consciente y planificada actuación falsaria desplegada por Iglesias con su personación (en la causa), fingiendo (…) haber sido víctima de un hecho que sabía inexistente".
TARJETA SUSTRAÍDA
Según el juez, los investigados "simulan" que la publicación de las imágenes de una tarjeta de memoria de ese teléfono en el periódico digital OK Diario en julio de 2016 fue el resultado de un encargo realizado a Villarejo para "perjudicar" al líder de Podemos.
Según recuerda el magistrado, Iglesias recibió del presidente del Grupo de Zeta (de medios de comunicación), Antonio Asensio, el 20 de enero de 2016, la tarjeta de memoria original procedente del teléfono de Bousselham, en la que comprobó que almacenaba archivos personales y de carácter muy íntimo.
"Pese a ello, se guardó la tarjeta en su poder, sin decírselo a su propietaria", explica el juez.
Cuando Iglesias devolvió la tarjeta a Bouselham, ya estaba "inservible para su funcionamiento".
Y considera que existen elementos de cargo suficientes para poder atribuir a Iglesias "los daños sufridos por la microtarjeta SD".
Podemos aseguró hoy "no dar crédito" ante la decisión de García Castellón cuando la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional había avalado la condición de perjudicado de Iglesias en esta causa. EFE