MÉXICO DF.- La emergencia por coronavirus evidenció las desigualdades existentes en nuestra región, pero al mismo tiempo "democratizó" la salud pues hoy, sin importar posición social, cualquiera puede enfermarse de COVID-19, dijo a Efe Fabrizio Feliciani, director para América Latina y el Caribe de la Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (UNOPS).
"La pandemia disminuyó, de alguna manera, las desigualdades porque cualquiera puede enfermarse. La pandemia democratizó la salud", remarcó en una entrevista.
La COVID-19, dijo, tomó por sorpresa a los sistemas de salud en el mundo y, especialmente a aquellos donde había más desigualdad como en los países latinoamericanos que tenían carencias críticas en cuestión de medicamentos e infraestructura.
Nadie en el mundo, aseveró, estaba preparado para afrontar una pandemia de la magnitud del coronavirus, principalmente porque siempre se dimensionó la salud como si fuera un bien intercambiable en el mercado.
"Lo que hemos aprendido en esta crisis es que la salud pública es probablemente el bien público de mayor importancia", consideró Feliciani.
Para el titular de la UNOPS, esto se evidenció desde el inicio de la pandemia pues el sistema de adquisición e insumos médicos es una de las partes que estaba más en riesgo en los países de la región.
UN OBSERVATORIO PARA FACILITAR LAS COMPRAS
La emergencia sanitaria del coronavirus ha generado que los Gobiernos del mundo y, en especial los de Latinoamérica, se planteen otras prioridades de inversión a las que tenían previo a la pandemia.
Pero también, ha generado compras urgentes para contar con los insumos médicos necesarios para atender a la población que se ha contagiado por este nuevo virus, e incluso, en mayo pasado, el canciller mexicano, Marcelo Ebrard, reconoció que estos insumos eran en este momento uno de los más preciados bienes en materia de salud.
Los Gobiernos, dijo Feliciani, tuvieron que enfrentarse a diversos retos como la volatilidad de precios y la incertidumbre sobre la relevancia o validez técnica de los insumos médicos y aprendieron a solucionar de manera inmediata.
Sin embargo, señaló, hay tres aspectos que se deben considerar para establecer un orden en estas compras: tener clara la relevancia de lo que se está comprando; asegurar la validez técnica de los insumos y determinar una "razonabilidad de precios".
Es por ello que la UNOPS puso a disposición de la región esta semana el Observatorio Regional de Precios de Medicamentos, el cual pretende ser una herramienta que ayude a tomar decisiones a los tomadores de decisiones en compra de medicamentos e insumos médicos.
"El fin es contar con una guía que ayude a comparar precios de los fármacos para COVID-19 y evitar adquirirlos a sobrecostos", aseveró.
Esta herramienta, dijo, será puesta a disposición de los Gobiernos para brindar información objetiva al comparar precios internacionales de fuentes oficiales, las cuales provienen de 21 países.
"Se trata de que el comprador público vea cómo se está comprando el medicamento en otros países y se den cuenta que siempre es diferente esta compra", enfatizó.
El observatorio compara el precio de los 124 medicamentos recomendados por la Organización Mundial de la Salud (OMS) que son fundamentales en la lucha contra el coronavirus pues, en promedio, el costo de los mismos se ha incrementado en 21 % desde el inicio de la pandemia.
"Tener a la vista los precios de compra en los países de América Latina ayuda a los compradores a tomar la decisión correcta", apuntó.
TRANSPARENCIA Y RENDICIÓN DE CUENTAS
La urgencia de adquisición de insumos médicos para afrontar la pandemia ha generado en algunos países incertidumbre y rumores de corrupción ligados a estas compras, por lo que otro de los objetivos del observatorio es ser una herramienta que contribuya "a fomentar la transparencia y rendición de cuentas".
Feliciani resaltó que si bien son datos que sirven primordialmente a los compradores gubernamentales, esta herramienta está disponible para que cualquier ciudadano pueda consultarlo "y así la ciudadanía puede confiar más en las autoridades", afirmó.
No obstante, resaltó la necesidad de cambios en la legislación de los países que ayuden a fomentar la racionalización de precios lo que permitirá también un combate a la corrupción y ahorros que se puedan traducir en infraestructura médica para afrontar pandemias futuras.
Finalmente, indicó que en América Latina se debe de cambiar hacia sistemas de salud más incluyentes.
"Eso es fundamental porque es democrático, porque no se va resolver un problema de salud si la gente pobre está enferma", apuntó. EFE