SANTO DOMINGO, República Dominicana.- El Observatorio Nacional para la Protección del Consumidor (ONPECO) consideró que procede declarar como emergencia el suministro de agua para que el recurso llegue de manera inclusiva a toda la población.
La organización de defensa de los consumidores entiende que el negocio particular de la venta de agua en camiones debe ser intervenido.
Propuso que la CAASD, de la capital, y CORASAN, de Santiago, asuman el control del agua y la lleven a todos los sectores carenciados para así garantizar una distribución justa y equitativa de ese bien tan necesario en estos momentos de la pandemia.
"La emergencia está planteada por la sequia, y en medio de esta se requiere de la intervención del Estado como el encargado de proteger los ciudadanos y garantizar un servicio vital como es el agua, recurso natural y patrimonio de todos", expresó.
En las últimas semanas hemos recibido denuncias constantes de sectores donde el agua es servida solo una vez a la semana y en algunos ya ni siquiera la reciben, lo que significa un atentado a la salud en medio de la pandemia COVID-19, cuando una de las medidas de prevención es lavarse las manos con frecuencia.
En otro orden, ONPECO deplora el incremento en el precio del botellón de agua, el cual en un año se elevó en un 70 por ciento, pasó de 50 pesos a 75 y en este mes de julio, en muchos lugares, sufrió un nuevo incremente de 15 pesos, sin ninguna explicación ni justificación, lo cual resulta criminal cuando la mayoría de los hogares ha sufrido una reducción de sus ingresos.