REDACCIÓN INTERNACIONAL.- Luego de que en abril pasado se publicó en Chile el primer estudio sobre la efectividad de la vacuna china Coronavac en población real para prevenir la covid-19, una nueva investigación con las mismas características, esta vez en Indonesia, confirmó las bondades y que es altamente efectivo este preparado farmacéutico del laboratorio Sinovac.

La Agencia Bloomberg publicó este martes detalles del estudio efectuado en Indonesia y destacó que la vacuna Coronavac de la farmacética Sinovac, ampliamente usada en República Dominicana y otras naciones en desarrollo, efectivamente "está acabando con la covid-19, primero entre los trabajadores de la salud en el caso de Indonesia".

Esto constituye, añade el trabajo de Bloomberg, "una señal alentadora para las docenas de países en desarrollo que dependen de la controvertida inyección china, que funcionó mucho peor que las vacunas occidentales en los ensayos clínicos", pero que a la postre "en el mundo real" se alza como un arma muy efectiva contra la enfermedad generada por el nuevo coronavirus.

UN ESTUDIO CON MÁS DE 25 MIL VACUNADOS

Una traducción no oficial del texto de Bloomberg permite establecer que Indonesia rastreó a 25 mil 374 trabajadores de la salud en la capital, Yakarta, durante 28 días después de recibir su segunda dosis y descubrió que la vacuna protegió al 100% de ellos de la muerte y al 96% de la hospitalización.

Estos porcentajes fueron confirmados por el ministro de Salud de Indonesia, Budi Gunadi Sadikin, entrevistado este mismo martes. Los trabajadores sanitarios fueron rastreados hasta finales de febrero.

Sadikin también confirmó que el 94% de esos trabajadores de la salud habían sido protegidos contra la infección, un resultado extraordinario que va más allá de lo que se midió en los numerosos ensayos clínicos de la inyección, aunque no está claro si los trabajadores fueron evaluados uniformemente para detectar portadores asintomáticos.

“Vemos una caída muy, muy drástica” en las hospitalizaciones y muertes entre los trabajadores médicos, dijo Sadikin.

Sin embargo, no se sabe contra qué cepa la vacuna funcionó en Indonesia, pero el país no ha señalado ningún brote importante impulsado por variantes preocupantes.

Los datos se suman a los proporcionados por un estudo clínico efectuado en Brasil que arrojó que la inyección de Sinovac es más efectiva de lo que demostró en la fase de prueba, que además estuvo plagada de tasas de eficacia divergentes y preguntas sin respuesta sobre la transparencia de los datos.

Los resultados de su mayor ensayo de fase III en Brasil (no con población real) sitúan la inyección Coronavac con una protección de poco más del 50%, la más baja entre todas las vacunas Covid de primera generación.

En una entrevista separada con Bloomberg, asimismo el martes, el director ejecutivo de Sinovac, Yin Weidong, defendió la disparidad en los datos clínicos y dijo que había una creciente evidencia de que Coronavac está funcionando mejor cuando se aplica en el mundo real.

Lugares donde se vacuna con Coronavac de Sinovac

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Pero los ejemplos del mundo real también muestran que la capacidad de la vacuna de Sinovac para sofocar los brotes requiere de que la gran mayoría de las personas se vacune, un escenario al que los países en desarrollo, con una infraestructura de salud deficiente y acceso limitado a las vacunas, no pueden alcanzar rápidamente.

En el estudio de trabajadores de salud de Indonesia, y en otro en una ciudad brasileña de 45.000 habitantes llamada Serrana, casi el 100% de las personas estudiadas estaban completamente vacunadas, con enfermedades graves y muertes que disminuyeron después de ser inoculadas.

Por el contrario, Chile vio un resurgimiento de casos después de vacunar a más de un tercio de su población de 19 millones, una de las tasas más rápidas del mundo, pero no lo suficientemente rápido como para detener la propagación de la variante agresiva que se extiende por América Latina.

“El primer grupo de personas vacunadas en Chile son los ancianos. Menos de 15 millones de dosis administradas en Chile significa que solo 7 millones de personas pudieron recibir nuestras vacunas. Eso equivale a solo el 36% de una población de 19 millones ”, dijo Yin. "Es normal que el país vea un resurgimiento de las infecciones a medida que aumentan las actividades sociales entre los más jóvenes, que en su mayoría no están vacunados", advirtió.

Entre las personas vacunadas con Coronavac en Chile, el 89% está protegido de "covid grave que requiere de cuidados intensivos", dijo Yin.

Es probable que la protección de la vacuna varíe de un lugar a otro debido a las variantes del virus, pero la inyección de Sinovac parece resistir bien las nuevas mutaciones preocupantes, confirmó.

Una pregunta clave para todas las vacunas anticovid es si pueden prevenir o disuadir la transmisión real del virus. Yin dijo el martes que Sinovac aún no sabe si su inyección, una vacuna inactivada tradicional, puede detener o reducir la contracción del virus, en primer lugar, pero el hecho de que ya está previniendo enfermedades graves y la muerte es más importante.

Si bien es poco probable que las vacunas sin ARNm sean tan efectivas para prevenir la transmisión, la creciente evidencia de que la inyección de Sinovac funciona es una bendición para la misión de China de abastecer al mundo en desarrollo en un intento por aumentar su influencia y prestigio.

También es una especie de reivindicación en medio de las críticas de que los desarrolladores de vacunas chinos revelaron menos datos y fueron menos transparentes sobre los eventos adversos graves en comparación con las empresas occidentales.

"Los resultados de la aplicación en el mundo real y los datos científicos que tenemos de los ensayos clínicos permitirán que el mundo juzgue nuestra vacuna de manera integral", dijo Yin. "Alentamos a nuestros socios y gobiernos en los países donde se está utilizando nuestra vacuna a que divulguen esos datos lo antes posible".

Indonesia fue uno de los primeros países en apostar por una vacuna china. En enero, el presidente Joko Widodo se convirtió en el primer líder mundial importante en recibir la vacuna Sinovac en un intento por sofocar el escepticismo en el país y en el extranjero.

Desde entonces, la economía más grande del sudeste asiático ha administrado más de 22 millones de dosis, principalmente Sinovac, ya que busca alcanzar la inmunidad colectiva para sus 270 millones de habitantes para fin de año.

“La tasa mínima de eficacia debe estar por encima del 50%, así que más allá de eso, la mejor vacuna es la que se puede obtener lo antes posible, ya que cada inyección puede prevenir muertes”, dijo el ministro de Salud Sadikin. "No se trata solo de obtener la tasa de eficacia más alta, sino de inocular a las personas rápidamente", remarcó.

Mientras que las vecinas Malasia y Tailandia están experimentando un resurgimiento de casos, la tasa de nuevas infecciones y muertes de Indonesia se ha estabilizado desde un máximo registrado en enero.

Pero con su población aún mayormente desprotegida, el próximo feriado podría hacer que los casos se multipliquen a medida que las personas se reúnan con sus familiares y viajen a pesar de las restricciones gubernamentales, advirtió Sadikin.