Nueva York.- El comercio local, el tránsito vehicular y peatonal, así como el flujo de pasajeros en los sistemas subterráneos de trenes de esta ciudad en todas sus direcciones volvieron a su ritmo normal luego de conocerse el arresto del principal sospechoso de cometer los actos terroristas del pasado fin de semana que dejaron decenas de heridos en Downtown, Manhattan.

Tras el arresto de Ahmad Khan Rahami, de 28 años, sospechoso de colocar bombas de fabricación casera en varios lugares del bajo Manhattan de la ciudad de Nueva York y una localidad costera de New Jersey, la tranquilidad ha vuelto en los residentes de ambos estados.

El gran operativo de búsqueda y captura vivo o muerto del responsable de los ataques terrorista fue permanente día y noche por parte del Buró de Investigaciones Federales (FBI), la policía de Nueva York (NYPD), de New Jersey, así como todos los departamentos investigativos de ambos estados.

Y es que la paz y tranquilidad de los residentes de ambos estados del Este de la unión americana habían sido alteradas de mala manera y había que recuperarlas a la mayor brevedad cueste lo que cueste.

El presidente Barack Obama afirmó ayer en Nueva York ante la Asamblea General de las Naciones Unidas (ONU) que “como estadounidenses no cedemos, ni cederemos nunca, al miedo”, los terroristas jamás vencerán a EEUU”. Dijo que las autoridades trabajan estrechamente en todos los niveles para prevenir más atentados, reforzar la seguridad nacional y proteger a la población. Estados Unidos jamás cederá ante la campaña de miedo de grupos terroristas como ISIS”.

Los reportes noticiosos dan cuenta que el terrorista del momento más buscado se había quedado dormido en un restaurante en la localidad de Linden, New Jersey, siendo identificado por los empleados del establecimiento quienes dieron parte de inmediato a la policía local.

Justo cuando el pánico y la histeria colectiva se apoderaban de la población, un mensaje de extrema emergencia  de búsqueda y de advertencia emitido por parte de la policía (NYPD) se difundió en todos los celulares que estaban funcionando en Nueva York y sus alrededores.

La activación del sistema de advertencia sobre un terrorista prófugo con nombre y apellido por parte de las autoridades de Nueva York y New Jersey trajo esperanza en todos los residentes de ambos estados al conocer la efectividad de los organismos investigativos como el FBI y otras agencias investigativas para dar con el responsable de los graves hechos cometidos.

El sistema de alerta, se utiliza en ocasiones de extrema emergencia interviniendo todos los celulares que estén funcionando en New York y los alrededores.

Tan pronto la policía neoyorkina dio a conocer que Ahmad Khan Rahami, de 28 años, era el principal sospechoso de los ataques, la esperanza de su captura inmediata reinaba en la población. Su nombre indicaba que era extranjero y de oriente medio.

Ahmad Khan Rahami, un ciudadano nacionalizado americano pero de origen afgano, inició con relativo éxito sus planes de colocación de bombas en varios puntos de NYC y NJ, pero dejando tras de sí huellas abundantes en cada uno de sus actos que dieron pistas a los investigadores para su rápida captura en menos de 48 horas de su primer ataque en New Jersey.

Sus huellas y ADN y su cara al descubierto grabada claramente por las cámaras de seguridad de Nueva York, así como los registros de video en las estaciones de peaje que mostraron que el sospechoso viajó de ida y vuelta entre New Jersey y  Manhattan el día de las explosiones, fueron las claves de su rápida captura según informes preliminares filtrados a la prensa local por funcionarios que hablaron bajo condición de anonimato.

Con estas precisas informaciones las autoridades hicieron público su nombre y fotografía pidiendo ayuda para localizar a Rahami, quien vivía con su familia musulmana en Elizabeth, New Jersey.

Los reportes noticiosos dan cuenta que el terrorista del momento más buscado se había quedado dormido en un restaurante en la localidad de Linden, New Jersey, siendo identificado por los empleados del establecimiento quienes dieron parte de inmediato a la policía local.

Nueva York recobra la calma ciudad Nueva York New York 1

Su captura se produjo luego de un intercambio de disparos entre el sospechoso y la policía en el que Rahami resultó herido en el hombro y una pierna. Otros dos agentes sufrieron heridas de bala y están siendo atendidos en hospitales locales. Ambos están fuera de peligro

Al concluir los operativos de captura, el comisario de la policía de Nueva York, James O’Neill expresó en rueda de prensa que "Hubo mucha tecnología implicada en esto, pero también un muy buen trabajo policial de la vieja escuela. Aseguramos que nuestros investigadores llegaran al fondo de quien está implicado y por qué".

Una fianza de $5.2 millones de dólares le fue impuesta a Rahami quien fue acusado de cinco delitos de intento de asesinato de agentes de policía. Otros cargos por las bombas y su secuela de heridos aún están pendientes por la fiscalía de Nueva York.