SANTO DOMINGO, República Dominicana.- “Cuando me siento en esa sala de audiencias y escucho la forma en cómo se calculó, se organizó la tentativa de asesinato contra mi hijo, no pude más que llenarme de indignación y de impotencia y por eso he llorado”, recordó el doctor Ramón Antonio (Negro) Veras al explicar sobre el impacto que le produjeron las grabaciones que revelaban como se planificó el atentado contra su hijo Jordi.
Dijo que “esas lágrimas son las mismas que he botado cuando en otras épocas he visto las víctimas de Balaguer”.
“Cuando en Santiago vi a Ramoncito Vargas Vila con los órganos desprendidos; cuando vi el cadáver de Orlando Martínez… son las mismas lágrimas, cuando me sentí impotente ante las cosas feas que se exhiben en la sociedad y he tenido que ser un testigo de piedra, en la sala de audiencias donde se ha conocido el caso de mi hijo”, explicó.
“Solo quiero que se haga justicia contra cualquier persona que pudiera resultar culpable de los hechos del atentado de asesinato contra mi hijo Jordi, quien perdió su ojo derecho, sufrió además la ruptura del maxilar inferior y de la segunda vértebra y, tiene colocado un hueso artificial en la superficie de la nariz, son lesiones permanentes que no se van a borrar nunca”, explicó.
Agregó todo eso se debió al ver y escuchar en esa sala de audiencias “como fríamente se narraba la forma en que se quiso organizar la tentativa de asesinato contra Jordi Veras; y cómo se discutió la tarifa para matar a mi hijo”.
Manifestó que sobre dichas grabaciones que le impactaron a él y su hijo Jordi durante el juicio, que “no ha lanzado flores a sus adversarios, pero ha jugado con cartas abiertas y francas; y ha sido leal en el debate público.
“He esperado de mis adversarios un atentado y me lo han hecho y he salido ileso, y no guardo rencor ni paso recibo, porque eso forma parte de la lucha. Siempre esperé un atentando contra mí, pero jamás pensé que contra un hijo mío se podía accionar en forma criminal por defender dignamente y rectamente con responsabilidad a una señora que fue víctima de un atentado criminal”, explicó Veras.
Señaló “cómo puedo sentirme yo al ver a su a mi hijo a los 42 años lesionado. Jordi es un hombre de mucha fe y valor, tiene muchos principios, ha aceptado con mucha hidalguía y firmeza su situación. Sinceramente para mí ha sido muy doloroso lo que le ha ocurrido a mi hijo”.
Dijo, al ser entrevistado por la vía telefónica por Tu Derecho a Saber, programa que conducen Namphi Rodríguez, Elías Ruíz Matuk, José Gregorio Cabrera, Adelaida Martínez, Edward Tavarez y Francis Javier, que el caso de su hijo Jordi le ha cambiado la vida y se ha llevado una parte de ella y, que es otro antes y después del atentado de asesinato contra su hijo.
Culpa de tardanza del proceso a la defensoría pública
El jurista Ramón Antonio Veras culpó este jueves a la Defensoría Pública de la tardanza que ha prolongado dar a conocer la sentencia del caso de atentado de asesinato contra su hijo Jordi Veras.
Al referirse a la Defensoría Pública, manifestó que le da mucha lástima, pena e indignación, ver la forma en cómo se ha comportado un órgano que debe estar al servicio de la justicia y no de la delincuencia, y que en sentido general, este organismo ha hecho causa común con los que quisieron asesinar a su hijo.
“Yo no culpo al tribunal de la tardanza, puramente se ha sometido a lo que dice el código, así como no podemos censurar al juez de naturaleza penal que pone en libertad a un asesino cuando todavía la víctima no ha llegado al cementerio”, dijo Negro Veras.
Dijo que “el último premio que mandó la Defensoría Pública fue un ´gran defensor´, el mismo que se burló en estrado de la familia Canaán Evers, cuando le asesinaron y descuartizaron a su hijo; es el mismo abogado que se ha burlado con sarcasmo de la sangre de Jordi y del dolor de mi familia”.
Señaló que dentro de la estructura que dirige la Defensoría Pública está la facultad de Derecho de la Universidad Autónoma de Santo Domingo, (UASD), la Fundación Institucionalidad y Justicia (FINJUS) y el Colegio de Abogados de la República Dominicana, instituciones que dijo “señala porque ha estado ligado a ellas históricamente”.
“Y hoy esas gentes (Defensoría Pública) son de las que van allí a ponerle piedra en el camino a la justicia para que no avance en el caso del hijo de Negro Veras. No puedo culpar a los jueces que escuchan los argumentos de aquellos que haciendo una labor como carro de concho defienden a todo el que le pague como abogado promiscuo”, señaló el destacado jurista.
Destacó que el defensor público que defiende a Adriano Román y sus cómplices, se han parado en esos estrados a lanzar por su garganta todo lo que pueda servir para hacer lenta la justicia, herir y fastidiar a la familia Veras.
“Estamos viviendo en una selva, no podemos seguir así devorándonos. Yo he ejercido el oficio de abogado durante 47 años, pero mi origen es de una escuela que respetaba el oficio, no utilizábamos ese paño negro para herir y burlarnos de las víctimas”, afirmó Veras.
Abogó para que el Código Penal se adapte a la realidad dominicana y dijo que hay que hacer un alto en el camino porque la sociedad anda mal.
Sobre el calvario que pasa una víctima procesalmente, dijo que “sabemos en el medio social que estamos viviendo en la presente coyuntura: bajo un ordenamiento económico y social agrietado desde arriba hasta abajo; agrietada la familia, las instituciones, cambio en el comportamiento y actitud con relación a la ética y la moral y las costumbres de la generalidad de los dominicanos”.