Roma, 23 jun (EFE).- El alcalde de Nápoles, Luigi de Magistris, firmó hoy una ordenanza para permitir el registro de las uniones civiles homosexuales celebradas en el extranjero en el Registro Civil de esta ciudad del sureste de Italia.
Así lo anunció el propio regidor en un tuit el mismo día en el que presentó el desfile Mediterranean Pride de Nápoles, que tendrá lugar en esta ciudad el próximo sábado, 28 de junio.
De Magistris argumentó su decisión con su afán por "reafirmar el principio de igualdad entre la diversidad", porque esta última, a su juicio, "es riqueza".
La normativa, según concretó, está inspirada en tratados internacionales y en la jurisprudencia italiana y permite que una pareja homosexual que se case en otro país donde estén permitidas este tipo de uniones puedan inscribirse en el Registro Civil napolitano.
De Magistris argumentó su decisión con su afán por "reafirmar el principio de igualdad entre la diversidad", porque esta última, a su juicio, "es riqueza"
"Estamos convencidos de que un alcalde tiene el derecho y el deber de permitir la inscripción en el Registro Civil del Estado de los matrimonios que, desgraciadamente, solo pueden ser celebrados en el extranjero", dijo el alcalde, perteneciente al partido progresista Revolución Cívica.
Tras la firma de la disposición, el propio alcalde fue quien publicó en su perfil oficial de la red social Twitter un comentario en el que se mostró satisfecho con la medida y de que Nápoles sea "una ciudad de libertad".
"Nápoles es una ciudad de libertad, de derechos y de amor. He firmado una ordenanza para la transcripción al Registro Común del ayuntamiento de los matrimonios entre parejas homosexuales", tuiteó.
La semana pasada, los medios italianos refirieron que el Gobierno de Matteo Renzi podría estar trabajando en una propuesta para autorizar las uniones civiles homosexuales en Italia, una medida que podría ver la luz el próximo mes de septiembre.
Con el proyecto de ley que el gabinete de Renzi puede estar estudiando, las parejas homosexuales tendrían los mismos derechos y deberes que los matrimonios convencionales pero con una salvedad: la adopción, que no estaría permitida para las primeras.
No obstante, para que esto ocurra, la medida deberá ser aceptada por el resto de fuerzas que componen el Ejecutivo de coalición italiano, que engloba partidos de diferentes espectros políticos, como el conservador o el tecnócrata.
En lo que va de año, en Italia dos parejas homosexuales han conseguido su inclusión en el registro civil italiano.
El primero es el caso de Giuseppe Chigiotti y Stefano Bucci, casados en Nueva York en 2012 y que consiguieron registrarse como pareja el pasado abril en el ayuntamiento italiano de Grosseto (norte), gracias a una decisión sin precedentes del tribunal de esa localidad toscana.
Un mes más tarde, Fausto Schermi y Elwin van Dijk, que contrajeron matrimonio en Holanda en 2008, obtuvieron también el registro como matrimonio en el consistorio de la localidad de Fano (este).
Esta noticia llegó el mismo día en el que la prensa se hizo eco de las polémicas declaraciones del párroco de Cameri (norte), Tarcisio Vicario, que, en un folleto semanal distribuido a los fieles tras la misa dominical del 1 de junio, definió las uniones civiles como "pecados" más graves que el homicidio. EFE