NUEVA YORK, EEUU.- Las cuatro principales aerolíneas de Estados Unidos cayeron este lunes en Wall Street tras conocerse que el "Gurú inversor", el multimillonario Warren Buffett, a través de su empresa Berkshire Hathway, vendió todas las acciones que tenía debido a la desconfianza que le genera el sector, azotado por la pandemia del COVID-19.

Se trata de American Airlines (-10 %), Delta (-7,4 %), SouthWest (-6,3 %) y United Airlines (-6,2 %), aerolíneas por las que el conglomerado del veterano Buffett había apostado decididamente en los últimos años hasta el punto de ser uno de sus mayores accionistas, pero el conocido como "oráculo de Omaha" afirmó este sábado haberse "equivocado".

Berkshire Hathaway divulgó que ha sufrido pérdidas de casi 50 mil millones de dólares en los últimos tres meses, con sus inversiones duramente golpeadas por el desplome que la pandemia ha provocado en los mercados, a diferencia de los casi 22 mil millones de beneficios que registró en el mismo periodo del año pasado.

Tras admitir haberse "equivocado" con American, Delta, SouthWest y United vendió todas sus acciones, que representaban en torno al 10 % de la capitalización de las firmas, de acuerdo a medios especializados.

La firma celebra una reunión anual de inversores más bien parecida a una feria empresarial en la localidad de Omaha (Nebraska), su domicilio social, una suerte de "Woodstock de los capitalistas" en el que miles de visitantes llenan un estadio para escuchar las predicciones de Buffett y que este año se ha reducido a una sesión de preguntas y respuestas por internet.

Fue en esa sesión cuando Buffett, de 89 años, dijo que el sector de las aerolíneas "ha cambiado en gran manera" debido al coronavirus, algo de lo que exculpó a sus ejecutivos, y apuntó que las cuatro principales firmas van a "tomar prestada una media de 10 mil a 12 mil millones de dólares cada una", lo que deja un futuro incierto.

LO DICHO EL SÁBADO

No obstante, el multimillonario se mostró confiado en una recuperación de la economía estadounidense porque, subrayó, "básicamente nada puede detener a Estados Unidos", aunque explicó que aunque uno puede querer apostar por la economía estadounidense es necesario hacerlo cuidadosamente, porque "nadie sabe lo que va a pasar mañana en el mercado". .

"El milagro estadounidense, la magia estadounidense, siempre ha prevalecido y lo volverá a hacer", declaró Buffett antes de lanzarse a un largo repaso histórico de las vicisitudes pasadas por el país y cómo su economía ha resurgido cada vez.

El veterano inversor abrió con ese mensaje optimista la reunión anual de su firma Berkshire Hathaway, una cita que los mercados siguen siempre con mucha atención para conocer las habitualmente certeras previsiones de Buffett, que le han valido ser conocido como el "oráculo de Omaha".

En su discurso, Buffett subrayó que el coronavirus plantea una situación difícil de evaluar, con un impacto económico que aún puede oscilar mucho dado el parón de la actividad, algo que no tiene paralelismos en la historia y que plantea una coyuntura muy distinta a la crisis de 2008.

En todo caso, insistió en que si hay una lección que se puede extraer de dificultades anteriores, desde la guerra civil estadounidense a la Gran Depresión y otros acontecimientos, es que "nunca se debe apostar en contra de Estados Unidos".

El multimillonario, conocido por saber aprovechar los momentos de crisis para hacerse con nuevos negocios e inversiones, ha mantenido por ahora una postura conservadora en la situación actual, conservando niveles récord de efectivo en la caja en vez de optar por grandes operaciones. (Con informaciones de EFE)