San Pedro de Macorís.- Las mujeres de la Iglesia Episcopal Dominicana (MIED) llamaron a poner fin a la violencia de género y al embarazo adolescente en la República Dominicana.

Las mujeres de la Iglesia Episcopal Dominicana (MIED), miembro de la Comunión Anglicana se dirigen a la sociedad a través de una Declaración, emitida con motivo de la 57 Asamblea anual de esa organización, mediante el documento titulado “ Un llamado Esperanzador: Detener la Violencia de Género y el Embarazo en Adolescentes en República Dominicana ”.

Indicaron ambos problemas presentan cifras alarmantes en el país y que, como  cristianas, están desafiadas a denunciar y trabajar para detenerlos.

Las mujeres episcopales insisten en cultivar la paz , la prevención,  la educación en valores basada en la  igualdad del hombre y la mujer. Con amor, respeto y dignidad humana.

"Las mujeres de la iglesia Episcopal exhortan a los/las dominicanos/as a trabajar unidos para lograr construir una sociedad de paz, amor, justicia y esperanza; al tiempo, que  reconocen que las niñas que quedan embarazadas antes de los 18 años rara vez pueden ejercer sus derechos a la educación, la salud, la protección y un nivel de vida adecuado. Pierden su niñez, asumen obligaciones de adultas y no siempre disfrutan de todos sus beneficios. Manteniéndose así abierta la brecha de la pobreza económica y emocional", expresaron.

Sostienen que los feminicidios como el embarazo de adolescente son el resultado de violencia contra la mujer, falta de una educación sexual integrada en las escuelas, hogar y comunidad de fe,  así como la falta en los jóvenes de implementación de su proyectos de vida.

Asimismo, señalan la falta de  políticas e iniciativas públicas de prevención que de manera sostenida permitan reducir las problemáticas, pobreza, falta de información de sus derechos y deberes, ausencia de una educación  en valores y de una cultura de paz y carencia de afectos.

Las representantes laicas de  más de 80 congregaciones de la Iglesia Episcopal en República Dominica, manifiestan la necesidad de promover la paz: “Una cadena de esperanzas construidas en  acciones colectivas que nos llevarán a  una cultura de paz y educación integral.  La mejor herencia que podemos dejar a las generaciones futuras es, precisamente, educar, concienciar y trabajar por lograr un presente mejor.” Afirman las mujeres. Al tiempo que hacen referencia al verso bíblico de Ezequiel 7:23 “Haz la cadena, porque la tierra está llena de crímenes sangrientos y la ciudad llena de violencia”.

En síntesis las mujeres de la Iglesia Episcopal hicieron las siguientes exhortaciones:

1.- La familia dominicana.  A trabajar desde el hogar los rescate de los valores familiares y morales. La pérdida  de estos ha generado un libertinaje. Al romperse la familia, se rompe lo más sagrado de las personas y de la sociedad. La integración del amor y el respeto. También desde el seno familiar fomentar una educación basada en la igualdad del hombre y la mujer.

2.-Las iglesias y comunidades cristianas. Al estudio y meditación de textos bíblicos sobre la creación del hombre y la mujer desde la perspectiva de los derechos humanos, de justicia social, de salud y de educación.

3.- Las comunidades de fe de crear espacios y encuentros eclesiales de  jóvenes para la concienciación sobre el respeto a la dignidad de las mujeres, y elaborar su proyecto de vida.

4.Al Estado dominicano a dar más pasos para poner en práctica efectiva la legislación y las políticas públicas en todos los niveles de gestión, que tengan como prioridad la protección  de la mujer y las adolescentes ,y sobre todo el control estricto de su implementación  orientadas a la prevención sin descuidar la penalización del delito.

5.- Las escuelas públicas, privadas,  universidades y  los medios de comunicación social para que ofrecer una formación e información sistemática  integral sobre la temática  de violencia contra la mujer y el embarazo en las adolescentes- e incentivar una nueva conciencia.  Reconociendo el respeto a  la  vida.

6.-Que el Estado  apoye y fortalezca a las organizaciones que trabajan en el tema de eliminación de violencia contra la mujer y prevención de embarazo en adolescentes. Juntos podemos erradicar el flagelo, que se ha convertido en un asunto de salud pública.

7.- Al poder judicial, además de las campañas publicitarias, debe  poner en funcionamiento casas de acogidas en todo el país, que contribuirían a la preservación de la vida de las  mujeres, niñas y niños menores de 14 años en situación de violencia a nivel nacional.

8.-A las iglesias a denunciar la violencia, acompañar a las víctimas, exigir la aplicación de las leyes y ofrecer un ministerio de restauración – liberación individual y colectiva.

Como mujeres de oración elevamos preces al Dios de Abraham, Isaac, Jacobo, Ruth, Ester, Débora, María Madre de Dios y María Magdalena. Por los huérfanos y los familiares de las mujeres que han sido víctimas de feminicidios en el país. Te pedimos que detengan las mentes y los cuerpos de sus agresores, y que la justicia social y divina recaiga sobre ellos. Te pedimos también, que abra nuestros corazones para construir y tener un país de justicia y paz. Amén.