Santiago de Chile, 19 jul (EFE).- El Senado de Chile aprobó hoy tras una maratoniana votación el proyecto de ley que despenaliza el aborto en tres causas, un paso clave para la ratificación final de una iniciativa prioritaria para el Gobierno de la presidenta Michelle Bachelet.
El proyecto de ley será revisado este mismo miércoles por la Cámara de Diputados en su tercer trámite legislativo. Si los diputados dan luz verde a las modificaciones realizadas por el Senado, el texto estará listo para su promulgación.
La sesión de votación en la sala del Senado se prolongó por más de quince horas. Los parlamentarios votaron y aprobaron por separado las tres circunstancias en las que se podrá interrumpir el embarazo -en caso de inviabilidad fetal, peligro de vida para la mujer y embarazo por violación- y otras indicaciones.
Bachelet celebró la aprobación del proyecto y calificó la jornada como "histórica".
"Creo que eso, más allá de que cada cual puede tener una opinión personal, lo que permite es que seamos un país donde las mujeres, frente a tales situaciones, puedan tomar la mejor decisión posible", dijo la mandataria durante una actividad oficial.
La portavoz del Ejecutivo, Paula Narváez, aseguró en su cuenta de Twitter que Chile dio "un paso histórico para las mujeres" con la iniciativa, que lleva discutiéndose en el Congreso más de dos años y medio.
Pese a que la coalición oficialista Nueva Mayoría tiene mayoría en el Senado, la aprobación del proyecto estaba en duda por la oposición de algunos senadores de la Democracia Cristiana (DC), la formación más conservadora que forma parte del bloque de centroizquierda.
Los senadores conservadores de la coalición Chile Vamos, como era previsible, votaron contra la aprobación de la despenalización del aborto en los tres casos.
El artículo sobre el embarazo por violación, que es el que generó más controversia entre la DC y el resto de partidos oficialistas, se aprobó después de casi tres horas de debate con 18 votos a favor y 16 en contra.
De este modo se establece que se autorizará la interrupción del embarazo cuando sea resultado de una violación y no hayan pasado más de doce semanas desde la gestación, plazo que se amplía a catorce semanas si la embarazada tiene menos de 14 años.
La ministra de la Mujer, Claudia Pascual, celebró la aprobación de la iniciativa y destacó que con ello se cumple "un compromiso con la ciudadanía, que ha tenido siempre una alta aprobación de este proyecto".
"Como Gobierno y a nombre de la presidenta Bachelet, queremos decirle al país que hoy tenemos una ley que nos permite despenalizar la interrupción del embarazo en los tres casos y que reconoce los derechos de las mujeres, niñas y adolescentes", dijo Pascual a los periodistas.
La portavoz del Ejecutivo, Paula Narváez, aseguró en su cuenta de Twitter que Chile dio "un paso histórico para las mujeres" con la iniciativa, que lleva discutiéndose en el Congreso más de dos años y medio.
Los parlamentarios de la oposición conservadora anunciaron que recurrirán al Tribunal Constitucional para frenar el proyecto, aunque deberán esperar a que la Cámara de Diputados revise este miércoles el texto.
"Lo que está aprobando el Congreso es relativizar el derecho a la vida, es decir, qué tipo de seres humanos tienen derecho a vivir", dijo la senadora y presidenta de la ultraconservadora Unión Demócrata Independiente (UDI), Jacqueline van Rysselberghe, según recoge el diario El Mercurio.
Actualmente, Chile es uno de los pocos países del mundo que mantiene una prohibición legal absoluta del aborto, junto con El Salvador, Nicaragua, Honduras, Haití, Surinam, Andorra, Malta y El Vaticano. EFE