Santo Domingo, 15 dic (EFE).- La muerte del menor fue confirmada a la prensa por fuentes del hospital infantil Robert Reid Cabral, en la capital, donde el niño fue ingresado a finales de noviembre desde el hospital Elio Fiallo, en su provincia natal de Pedernales, en el suroeste dominicano.
Posteriormente, a través de un comunicado, el citado hospital lamentó la muerte del menor e informó de que los análisis enviados al Centro de Control y Prevención de Enfermedades (CDC) de Atlanta, Estados Unidos, "confirmaron la presencia del virus de rabia de la variante canina en el niño de seis años en todas las muestras de saliva y folículo piloso".
Los especialistas indicaron que el paciente nunca desarrolló anticuerpos protectores mientras estuvo en coma inducido, agregó la información e indicó que el cadáver fue enviado al Laboratorio Nacional por protocolo de bioseguridad, para una necropsia.
El niño, que hace aproximadamente siete meses fue mordido por un perro en el pie derecho, según relató la madre, fue ingresado por presentar antecedentes de fiebre, dolor en el pecho, en la pierna derecha, hidrofobia y espasmos musculares, entre otras dolencias, informó el pasado 29 de noviembre el Ministerio de Salud.
Según lo narrado por la madre del menor, vecinos mataron a palos al perro, que presentaba agresividad y sialorrea.
La condición del menor empeoró esta semana, de acuerdo con las fuentes que confirmaron hoy su deceso.
Entre agosto y septiembre de este año, en Pedernales se realizó una jornada de vacunación de perros y gatos, logrando inmunizar 4.708 animales de una población estimada de 5.000, para una cobertura de 94,16 %, de acuerdo con la cartera de Salud. EFE
La rabia es mortal una vez que llega a desarrollarse
La Dirección Provincial de Salud de Pedernales informó a inicios de mes que mantenía activadas las brigadas encargadas de las labores de control y evaluación de las personas involucradas en el caso, incluyendo amigos, familiares y el personal de salud de los centros sanitarios al que fue llevado el menor, en los cuales, aparentemente, solo recibió atenciones de limpieza de la herida causada por el perro infectado que lo agredió, pero no la vacuna.
Jesús Feris Iglesias, jefe del Departamento de Enfermedades Infecciosas del Hospital Infantil Dr. Robert Reid Cabral, donde se encontraba internado el menor tras ser trasladado desde Pedernales, recordó que la rabia es mortal en prácticamente el 100% de los casos una vez que llega a desarrollarse.
Jesús Feris Iglesias aludió al llamado “Protocolo de Milwaukee”, que consiste en provocar un coma farmacológico para administrarle antivirales al enfermo de rabia que ya ha desarrollado el mal. El protocolo, sin embargo, no tiene éxito en la mayoría de las ocasiones. Además, subrayó Jesús Feris Iglesias, demanda cuantiosos recursos económicos y una atención profesional médica permanente.