NUEVA YORK, EEUU.- La mayor asociación del comercio minorista de EEUU pidió este lunes a la sociedad trabajar "unidos para frenar la injusticia racial" y pidió "que la gente deje de saquear y destruir bajo el nombre de una protesta" tras la ola de disturbios en diferentes ciudades del país, que ha llevado a reorganizar las reaperturas por la pandemia.
"Desfigurar, saquear y desvalijar negocios, ya sea visto como un resultado directo de la furia o un acto oportunista de vandalismo y robo, impide el progreso y la sanación", expresó en un comunicado el máximo ejecutivo de la Federación Nacional de Minoristas (NRF, en inglés), Matthew Shay, que urgió a las autoridades y líderes comunitarios a "buscar soluciones".
Las protestas para denunciar la brutalidad policial y la injusticia racial que se llevan sucediendo varios días en Estados Unidos tras la muerte del afroamericano George Floyd en Mineápolis a manos de un policía, que lo asfixió hincándole la rodilla en el cuello, han derivado en algunos puntos en disturbios y en importantes daños y saqueos a tiendas.
Shay señaló que la sociedad en general está "expresando su rabia y frustración a través de protestas pacíficas" por la muerte injustificable de Floyd, pero urgió a los grupos violentos a "dejar de saquear y destruir en bajo el nombre de una protesta" porque impide "el acceso a los bienes, servicios y trabajos para aquellos que más lo necesitan".
"La principal preocupación de nuestros minoristas es la seguridad de sus equipos, las comunidades a las que sirven y el bienestar físico y emocional de sus colegas y clientes afroamericanos. Los minoristas estamos comprometidos con los valores de diversidad, inclusión y oportunidad que ha estado siempre en el corazón de nuestro sector", dijo.
"Las acciones de unos pocos están impactando no solo a tiendas, pero también poniendo en riesgo a la gente que trabaja y compra en ellas", agregó, en referencia a los incidentes registrados en áreas comerciales como Rodeo Drive (Los Angeles), State Street (Chicago), SoHo (Nueva York) y el centro de Mineápolis, con comercios saqueados y en algunos casos quemados.
Grandes empresas como Apple, Whole Foods (propiedad de Amazon), Target y Walmart han decidido cerrar algunas de sus tiendas en puntos golpeados por las protesta, lo que ha supuesto el freno a algunas de las reaperturas en marcha tras la clausura obligada por la pandemia del COVID-19, que ha generado niveles récord de desempleo en el país.
El ejecutivo consideró que los disturbios violentos "quitan el foco de la conversación que debemos tener si queremos sanar las heridas" y llamó a la "acción": a trabajar para frenar la justicia racial y para "crear un mayor entendimiento de las dificultades a las que se enfrentan los hombres y las mujeres afroamericanos, jóvenes y ancianos, en comunidades grandes y pequeñas". EFE