SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Los mnistros de Educación de la Región del Sistema de Integración Centroamericano (SICA) expresaron apoyo a la educación presencial con la reapertura de las escuelas de manera prioritaria.
Indicaron que aunque consideran urgente las clases presenciales, debe de hacerse de manera gradual en todos los niveles para aquellos países que aún no lo han hecho.
Resaltaron que entre 11 y 12 millones de estudiantes centroamericanos aún no han regresado a clases presenciales debido a que sus escuelas permanecen cerradas.
Explicaron que América Latina y el Caribe sigue siendo la región más afectada por el prolongado cierre de escuelas, 3 de cada 5 niños y niñas que perdieron un año escolar completo en todo el mundo se encuentran en la región.
Subrayaron que aproximadamente el 60% de todas las personas estudiantes de América Latina y el Caribe aún no ha tenido acceso a clases presenciales.
"A través de esta declaración instamos a que en todos los países se faciliten diálogos con las organizaciones de docentes, los padres y madres de familia y los y las estudiantes en apoyo al proceso de reapertura segura y gradual de las escuelas, y se fortalezca la coordinación entre los sectores de Educación y Salud”, dijo Giselle Cruz Maduro, presidenta Protempore de la CECC/SICA y Ministra de Educación Pública de Costa Rica.
Advirtieron que cuanto más tiempo permanezcan cerradas las instituciones educativas, menos probable será que las personas estudiantes más vulnerables vuelvan a clase, incluidas las personas con discapacidad, migrantes o pertenecientes a comunidades indígenas.
Asimismo, para Jean Gough, Directora Regional de UNICEF para América Latina y el Caribe, manifestó hoy es un día de esperanza para millones de niños y niñas que todavía se encuentran fuera de las aulas.
Por primera vez, todos los Ministros de Educación de Educación de la Región SICA se comprometen con la urgente reapertura de las escuelas.
Agregó que “UNICEF está comprometido en apoyar y guiar su implementación. Es evidente que cada día más de cierre de las escuelas pone más en riesgo la educación de los niños y las niñas, especialmente de aquellos que no tienen acceso a internet y no cuentan con el apoyo de sus padres y madres en la casa. Centroamérica no puede perder un segundo año escolar sin clases presenciales”.