SANTO DOMINGO, República Dominicana.- “Las palabras del Gobierno son un alivio, pero el mentol que nosotros necesitamos es la comida que se compra con dinero. Por eso necesitamos nuestra pensión”.
Jesús Núñez hablaba desde un muro al que subió para dirigirse a sus compañeros. En medio del sol lo escuchaban los ex trabajadores cañeros que se manifestaban en reclamo de una pensión frente a al Instituto Dominicano de Seguros Sociales (IDSS).
Tanto Jesús como sus compañeros demandan del Gobierno el pago de pensión a 22 mil personas que trabajaron para el Consejo Estatal del Azúcar (CEA), cotizaron en el IDSS y, tras largos años de faena se quedaron con las manos vacías.
Restó importancia a las declaraciones del vicepresidente de que les iban a gestionar su pensión. Con la noticia de periódico en la mano dijo:
“Esto es un papel y, como dicen la canción, el papel lo aguanta todo y no hay una cosa que sepa más que Leonel y sus funcionarios”.
La mayoría de los manifestantes es gente mayor, sin recursos y procedente de los bateyes. Denuncian que muchos de ellos se han muerto esperando la anhelada pensión.
Núñez anunció que la próxima irán al Palacio Nacional para llevar hasta las autoridades su reclamo. Mientras, estarán trabajando en más de 180 bateyes e incorporarán a la lucha a los hijos, hijas, esposas, nietos y nietas de los trabajadores cañeros.