SANTO DOMINGO, República Dominicana.- El gubernamental Servicio Nacional de Salud (SNS) informó hoy que 130 psiquiatras prestan servicios en Unidades de Intervención en Crisis de hospitales provinciales y especializados para fortalecer los programas de salud mental en República Dominicana y que 421 psicólogos contribuyen a garantizar los servicios de atención mental que se ofrecen de forma gratuita en los establecimientos de la Red Única Pública.

El director ejecutivo del Servicio Nacional de Salud (SNS), Chanel Rosa Chupany, ratificó el compromiso de la instancia bajo su mando de "saldar una deuda histórica con el pueblo dominicano" en esta materia, y aseguró que se trabaja para que cada hospital provincial cuente con un profesional de la salud mental.

Junto al Ministerio de Salud, la Society for Family Health y el Popular Services International, el SNS  ha informado que desarrolla el proyecto "El Poder de la Atención Primaria para Servicios de Salud Mental", cuyo objetivo apunta a incrementar el acceso y mejorar la calidad de la detección, diagnóstico y cuidado de las enfermedades mentales más comunes en el país.

Crece número de trastornados por depresión y ansiedad

Según cifras de la Organización Mundial de la Salud (OMS), el trastorno por depresión es una de las enfermedades más frecuentes y afectó en 2017 a cerca de 322 millones de personas, un 18 % más que hace una década. Otros 264 millones padecen trastornos de ansiedad, más del 15 % respecto a hace diez años.


Algunas de las causas por la cual los ancianos, por ejemplo, sufren esta enfermedad son "las características de su entorno y a la exclusión a la que suele sometérseles.

Aunque no está demostrada como causa principal de muerte entre los mayores, la depresión sí puede afectar la funcionalidad y calidad de vida de estos, porque puede provocar trastornos de apetito o de sueño, fatiga crónica y dolor de cabeza, lo que dificulta sus relaciones sociales.

Ocho de cada diez personas en Latinoamérica tienen problemas de funcionalidad, ya sea en su vida cotidiana o en sus relaciones personales y laborales, debido a que no saben manejar sus emociones y habilidades para la vida.

Conflictos que las personas tienen consigo mismos y que no logran resolver

"La depresión, ansiedad y angustia no son más que el resultado de un conflicto que las personas tienen consigo mismos y que no logran resolver", dijo la terapeuta Rita Jaime, presidenta del Instituto Panamericano de Investigación para las Relaciones Exitosas e Inteligentes (Ipirei) con sede en Ciudad de México.

La especialista señaló que actualmente las personas han modificado el desarrollo de sus habilidades para la vida debido a factores como la individualidad en la que se vive y el uso excesivo de la tecnología.

"El uso de la tecnología vino a poner en jaque la capacidad de las habilidades en los procesos mentales. Hoy los individuos viven en la superficialidad, tienen poca cohesión en sociedad, son poco responsables y eso ha llevado a un resquebrajamiento social y un conflicto en relación con el otro", indicó Rita Jaime en una entrevista con la Agencia Efe.

La especialista explicó que estar en contacto tanto tiempo con la tecnología ha incidido para que las personas actualmente pierdan conexiones neuronales que permitan la identificación con el otro, lo que evita que la gente tenga empatía y por ello se vean cada vez más casos de violencia extrema.

Además, explicó, estar en un mundo de individualismo ha llevado a que los problemas de depresión y ansiedad aumenten de manera considerable.

Suicidios

En tanto, el doctor Juan Trejo, director de Salud Mental  del Ipirei, señaló que la falta de capacidad de las personas para socializar y manejar emociones como la frustración ha elevado el número de suicidios en grupos de edad cada vez menores.

Más de 800.000 personas se suicidan cada año y esta es la segunda causa principal de defunción en el grupo de edad de 15 a 29 años, según datos de la OMS. En Latinoamérica, se estima, ocurren alrededor de 65.000 defunciones por suicidio anualmente.

Una realidad desgarradora en Ghana marca Día Mundial de la Salud Mental

Cientos de personas con trastornos mentales permanecen confinadas y encadenadas en instituciones religiosas en Ghana, pese a que el Gobierno de ese país africano se comprometió hace un año a erradicar estas prácticas, denunció la organización Human Rights Watch (HRW).

"Cientos de personas con discapacidades psicosociales todavía están encadenadas como ganado", señaló Rau Barriga, responsable del área de derechos de discapacitados de HRW en un comunicado.

La ONG instó a las autoridades locales a tomar medidas "inmediatas" para prohibir el uso de cadenas con este tipo de enfermos y establecer un sistema de control que asegure que la prohibición se cumple.

"No solo es importante que se quiten las cadenas, el Gobierno necesita sensibilizar a las comunidades e invertir en servicios de salud mental locales. Si no, la gente con discapacidades psicosociales podría ser de nuevo objeto de la cruel y aberrante práctica del encadenamiento y la prohibición del Gobierno sería una amenaza vacía", agregó.

La organización recordó que en 2017, con motivo precisamente del Día Mundial de la Salud Mental, Ghana se comprometió a aplicar las recomendaciones internacionales que establecen que este tipo de pacientes no pueden ser sometidos a "tortura, crueldad, trabajo forzado ni otros tratamientos inhumanos", incluido el encadenamiento.

Las familias llevan a los pacientes a centros como este bajo la extendida creencia de que este tipo de discapacidades son consecuencia de maldiciones o de espíritus malignos.