SANTIAGO, República Dominicana.-El mismo día en que miles de mujeres se movilizaran en el país para exigir el cese de la violencia contra la mujer, el manto de la muerte se posó sobre  Inés de la Cruz, de 35 años de edad, empleada doméstica en la urbanización de clase media Cerro Hermoso, al nordeste del centro urbano de Santiago de los Caballeros.

En la noche del viernes  Inés de la Cruz fue hallada muerta, con signos de haber sido golpeada y estrangulada, según la versión de un amigo de los dueños de la vivienda donde ocurrió el hecho, quien fue entrevistado la mañana de este sábado por periodistas de Acento.com.do y Listín Diario.

El hombre, que se identificó como  compañero de profesión  y de trabajo de la patrona  de Inés de la Cruz,  a quien describió como una persona afable y trabajadora, dijo que la tragedia se habría producido al atardecer del viernes 25 de noviembre, día en que en Santiago y el país se desarrollaron  decenas de actividades contra la violencia de género.

Dijo que  la tesis preliminar que se maneja es que pudo haberse tratado  de un asalto, ya que quien mató a la mujer cargaron  con una significativa cantidad de bebidas alcohólicas costosas, sobre todo Whisky. La trabajadora doméstica muerta era madre de tres hijos y vivía en el distrito municipal de Hato del Yaque, al suroeste de del municipio de la provincia de Santiago.

Todavía la PN no tiene explicación

Sobre este hecho aún no se conoce una versión del Comando Regional Cibao Central, con sede en Santiago, representado por el vocero teniente coronel, Lorenzo Morillo, ni de ninguna otra fuente policial, mientras entre los familiares de la trabajadora doméstica pululan las versiones y confusiones, entre llantos de dolor e impotencia.

Los deudos alegan que por el accionar del o de los atacantes, se deduce que podría haber familiaridad entre la agredida y los agresores y achacan a este aspecto la decisión de matar a la doméstica, por temor a una delación

Las  versiones recogidas  en la casa materna de Inés de la Cruz, donde se desarrolló el velatorio, ubicada en el empedrado y empobrecido barrio Los Jiménez, de Hato del Yaque,  apuntan  a miembros de la familia de los patronos, como primeros sospechosos del hecho, aunque ninguno quiso adelantarse a mencionar nombres.

Los deudos alegan que por el accionar del o de los atacantes, se deduce que podría haber familiaridad entre la agredida y los agresores y achacan a este aspecto la decisión de matar a la doméstica, por temor a una delación.

Alrededor del féretro donde yacía al mediodía de este sábado  el cadáver de Inés de la Cruz, se repetía una y otra vez  en voz baja la  tímida versión de que los primeros  en ser investigados, debían ser los patronos y sus allegados.

La  doméstica acostumbraba a permanecer sola en la casa por mucho tiempo, cuentan que era una empleada de confianza  por el tiempo que llevaba allí y la honestidad y eficiencia con que se manejaba. Con esta versión coincidieron quienes viven en las cercanías donde la mujer trabajaba.

Sospechosos

Mientras se avanzan las averiguaciones de un caso se que maneja con sigilo por involucrar a personas de clase media de Santiago, el hijo mayor de la víctima,  quien aseguró hace poco  cumplió  18 años de edad, Miguel Ángel Vélez de la Cruz,  tiene un enfoque más crítico y directo de la situación.

Miguel Ángel Vélez de la Cruz hijo de señora asesinadaInvadido por el dolor Miguel Ángel no vaciló en afirmar que  la muerte de su madre no fue por un simple asalto,  sino de un asesinato, porque hacía dos días que su madre le había dicho que dejaría el trabajo, porque tenía problema con un hijo de los patronos, quien según explicó tenía presuntamente algunos inconvenientes conductuales en su accionar que los enfrentaba con los jefes de su madre.

Vélez de la Cruz, dijo que el joven a quien no identificó  presuntamente tomaba algunas cosas de la casa a escondidas de los patronos de su madre  y que hubo momento en la amenazaba para que no lo delatara.

Vélez de la Cruz contó a periodistas de Acento.com.do y del Listín Diario, que el hijo se los patronos de su progenitora acostumbraba  a ingerir bebidas alcohólicas muy costosas y que luego ponías los envases vacíos (botellas) en sus respectivas cajas. Agregó que se trata de una persona de quien su madre (la doméstica) presuntamente sabía muchas  situaciones que el  joven quería ocultar.

De manera extraoficial corrió la versión de que los dueños de la  casa donde ocurrió la tragedia están detenidos para fines de investigación, pero no se ha podido confirmar esta versión con la Policía.

ESPECIAL 25 DE NOVIEMBRE