Kabul/Islamabad/Dacca, 30 oct (EFE).- Multitudinarias protestas tuvieron lugar en Afganistán, Pakistán y Bangladesh contra el presidente francés, Emmanuel Macron, en las que con gritos y pancartas los participantes mostraron su indignación por sus recientes comentarios sobre el islam y su respaldo a las caricaturas del profeta Mahoma.

BANGLADESH

En Dacca, y convocados por varios partidos islamistas, unos 20.000 manifestantes se congregaron contra las declaraciones de Macron tras la oración del viernes, explicaron a Efe fuentes policiales.

Los manifestantes exigieron una disculpa pública del presidente francés y que el Gobierno convoque al embajador de Francia. "A menos que nuestras demandas sean escuchadas, instamos a la gente a boicotear los productos franceses", dijo a Efe Shahidul Islam Kabir, un manifestante y líder de la organización Islami Andolon Bangladesh.

Varias protestas tuvieron lugar también en otros lugares del país a la salida de las mezquitas, en las que los manifestantes quemaron carteles con el rostro de Macron en señal de repudio.

El portavoz del grupo radical islamista Hefazat-e-Islam Hefazat, Azizul Islam, pidió al Gobierno cortar la relación diplomática con Francia si Macron no se disculpa.

Francia "no renunciará a las caricaturas", dijo el presidente francés la semana pasada, en el homenaje nacional que se rindió al profesor Samuel Paty, quien murió decapitado por mostrárselas a sus alumnos en una clase sobre la libertad de expresión.

AFGANISTÁN

En Kabul, miles de afganos, en su mayoría jóvenes y clérigos islámicos, protestaron en las calles para condenar estas declaraciones, que calificaron de "antiislamistas".

La protesta que comenzó poco después de las oraciones del viernes en la Gran Mezquita Central fue convocada por la Sociedad Afgana de la Juventud Musulmana, una organización de jóvenes voluntarios que tienen presencia en 31 de las 34 provincias afganas, dijo a Efe Saif-ul-Islam, uno de los organizadores de la manifestación.

"El objetivo principal de la protesta es condenar el insulto del presidente francés al islam y al profeta del islam, y pedir a los occidentales que no vean como enemigos a los musulmanes y al islam sin una razón lógica", señaló.

Entre consignas como "muerte a Francia, muerte al presidente francés, amamos a Mahoma", los manifestantes rechazaron las declaraciones de Macron, y mostraron su indignación rompiendo carteles con su imagen.

Los afganos se hicieron eco de los llamamientos de otros países musulmanes pidiendo a sus compatriotas que "boicoteen los productos franceses".

"Hacer caricaturas del profeta Mahoma y hacer comentarios insultantes por parte del presidente francés son actos para difamar el islam e impedir el progreso y expansión del islam en el mundo", dijo a Efe Omar Rahmani, otro de los manifestantes.

PAKISTÁN

En Islamabad al grito de "Queremos la cabeza del blasfemo" y "En el nombre del profeta la muerte es aceptada", unos mil manifestantes trataron de llegar a la embajada de Francia, pero la policía les impidió el paso.

Los islamistas, casi todos jóvenes, se enfrentaron a las fuerzas del orden público, que respondieron con gases para contener la manifestación.

Varios manifestantes destrozaron carteles colocados en farolas que mostraban la imagen del presidente francés con una pisada en su cara -signo de desprecio en muchos países musulmanes- y la leyenda: "La obligación del Gobierno: expulsar al embajador de Francia".

"No eres un musulmán", le espetó un islamista a uno de los policías que trataban de contener el avance de los manifestantes.

Otras protestas también se celebraron en las ciudades paquistaníes de Karachi, Lahore o Peshawar, donde han llamado a boicotear los productos franceses y colocado fotos de Macron en alguna tienda para que los clientes las pisen al entrar.

Las palabras de Macron provocaron una ola de condena en todo el mundo islámico, unas muestras de indignación que se multiplicaron, cuando, además de ser viernes, día sagrado musulmán, se conmemora el aniversario del nacimiento de Mahoma. EFE