SANTO DOMINGO, República Dominicana.- “No hay evidencia de que sean efectivos para reducir la propagación de COVID-19” y, además, los productos químicos utilizados en los túneles de desinfección, muchos en base al cloro, “pueden causar irritación o daños en la piel, los ojos o las vías respiratorias”, advirtió una instancia sanitaria de EEUU.

Los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de EEUU se sumaron así a instancias como la OPS/OMS en desaconsejar este método de desinfección como arma contra el coronavirus.

https://acento.com.do/2020/actualidad/8804661-instalan-primeros-tuneles-sanitizantes-para-combatir-propagacion-covid-19/

Tampoco se conoce la eficacia de otros métodos de desinfección como las ondas ultrasónicas, la radiación ultravioleta (UV) de alta intensidad y la luz azul LED contra el virus COVID-19, añaden los CDC que solo recomiendan el uso de desinfectantes de superficie de United States Environmental Protection Agency contra el virus que causa COVID-19.

LA OPS/OMS

La Organización Panamericana de la Salud (OPS) y la Organización Mundial de la Salud (OMS) ya habían advertido que no recomiendan el uso de túneles desinfectantes o sanitización porque "no existe evidencia sobre la eficacia" en la lucha contra la propagación de la COVID-19.

"El uso de túneles desinfectantes o sanitizantes para uso de la población no es recomendación de la OPS/OMS", indicó la representante de la organización en Honduras, Piedad Huerta, en una carta enviada a la ministra hondureña de Salud, Alba Consuelo Flores, y divulgada este domingo en medios locales de prensa.

Insistió en que "no existe evidencia sobre la eficacia de estos sistemas para realizar una desinfección efectiva del virus causante del COVID-19” y que, además, genera “una falsa sensación de seguridad en la población".

Esa supuesta seguridad podría generar que la población descuide la aplicación de medidas básicas de prevención como "el lavado frecuente de manos, uso de mascarilla y el distanciamiento social", añade el texto de la funcionaria de la OPS.

Los productos desinfectantes “para uso en superficies porosas y no porosas, con requerimientos variables de tiempos de contacto, al ser aplicados directamente a las personas, aún en bajas concentraciones y de forma muy breve, puede producir efectos adversos con afectaciones a la piel, ojos y mucosas", advierte.

"Además, la inhalación de estas sustancias puede causar irritación en la vías respiratoria altas y bajas provocando síntomas que pueden ser confundidos con COVID-19″.

En definitiva, "la OPS/OMS no recomienda uso de túneles sanitizantes o similares con aplicación de químicos", enfatiza.

En España

El Ministerio de Sanidad de España asegura que actualmente no existe ningún producto virucida que esté autorizado para su uso por nebulización sobre personas, por lo que advierte de que la técnica de aplicación que se anuncia en los llamados túneles desinfectantes "de ningún modo" puede ser usada sobre la población para combatir el coronavirus.

En España, una empresa gallega ha sido pionera en la construcción de un aparato diseñado para estos fines. Se trata de una especie de túnel de lavado que desinfectaría antes de entrar en grandes superficies, como los centros comerciales.

"Un uso inadecuado de biocidas introduce un doble riesgo: posibles daños para la salud humana y dar una falsa sensación de seguridad", señala Sanidad en una nota sobre el uso de productos biocidas para la desinfección de la COVID-19.

La situación "extraordinaria" producida por la crisis sanitaria del coronavirus ha generado unas necesidades de desinfección muy superiores a las habituales y un aumento del uso de biocidas, entre los que se encuentran los desinfectantes virucidas, señala.

Sanidad explica que estos productos son necesarios para el control de los organismos nocivos para la salud humana, pero precisa que pueden implicar riesgos para las personas debido a sus propiedades intrínsecas y un uso no adecuado, y recuerda que su comercialización y uso se encuentra regulado.

No obstante, hay sustancias biocidas que se encuentran en evaluación en la Unión Europea permitiéndose, a la espera de finalizar este proceso, la comercialización de los productos que las contienen, siempre que se respeten las medidas de seguridad correspondientes.

En este grupo, según Sanidad, se encuentran algunos cuya generación se realiza "in situ" mediante maquinaria, como es el ozono. Este hecho impide, además, que tengan un etiquetado que avise de su peligrosidad y usos, a diferencia del resto de biocidas.

Por ello, para este tipo de biocidas, cuya comercialización debe haber sido notificada al Ministerio de Sanidad, se recuerda la importancia de seguir las recomendaciones del fabricante.

Tampoco se puede aplicar ozono en personas

Y ante la proliferación en el mercado de dispositivos productores de ozono, Sanidad advierte que, al igual que otros biocidas, no se puede aplicar en presencia de personas, y quienes lo apliquen deben contar con los equipos de protección adecuados.

Sanidad advierte, por último, de que se deberá ventilar adecuadamente el lugar desinfectado antes de su uso, así como de que puede reaccionar con sustancias inflamables y puede producir reacciones químicas peligrosas al contacto con otros productos químicos.