PUERTO PRÍNCIPE, Haití.-El académico Watson Denis declaró que la ley dominicana que establece un régimen especial para las personas desnacionalizadas por la Sentencia 168 del Tribunal Constitucional, que afectó sobre todo a dominicanos de ascendencia haitiana, no ha llenado las expectativas.
Según el diario conservador haitiano Le Nouvelliste, en una noticia firmada por Amos Cincir, el doctor Watson Denis, profesor de la Universidad Estatal de Haití (UEH) y Director Ejecutivo del Centre CHALLENGES (Centro DESAFÍOS), dijo en una conferencia que la ley de 22 de mayo del presidente Danilo Medina pasa por alto el problema de la desnacionalización de 210,000 dominicanos de ascendencia haitiana, víctimas de la sentencia TC 068-13.
Al insistir en que la legislación no dio respuesta a todas las expectativas, sostuvo que “la ley Medina”, tal como está formulada, no va a resolver el problema ni en un 40%.
“Esta sentencia no se ajusta a ninguna familia del derecho conocido en el mundo occidental, ya sea la romano-germánica practicada en Haití y la República Dominicana, o la ley común aplicada por los anglosajones”
La conferencia del profesor Watson Denis sobre el tema “Por qué Haití debe defender a los dominicanos de ascendencia haitiana desnacionalizados en la República Dominicana”, atrajo a más de medio centenar de estudiantes, profesionales, periodistas y personalidades haitianas interesadas en esta cuestión.
El Dr. Denis dijo que Haití debe defender a los 210,000 dominicanos desnacionalizados de origen haitiano que nacieron y viven en la República Dominicana.
En su discurso, el profesor Watson Denis argumenta que el fallo dictado por las autoridades dominicanas con respecto de 210,000 dominicanos de ascendencia haitiana a través de la sentencia TC-068-13, es ilegal e inconstitucional.
Asegura que la sentencia viola flagrantemente los principios del derecho internacional, incluido el derecho a la nacionalidad.
“Esta sentencia no se ajusta a ninguna familia del derecho conocido en el mundo occidental, ya sea la romano-germánica practicada en Haití y la República Dominicana, o la ley común aplicada por los anglosajones”, precisa.
“La sentencia dominicana no es una sentencia ordinaria simple. Es una decisión política del sistema dominicano contra los dominico-haitianos (los hijos de haitianos nacidos en la República Dominicana), que intenta borrar para siempre a los dominicanos de ascendencia haitiana de la lista electoral y hacer caso omiso de su derecho a la ciudadanía dominicana (ignorando los derechos civiles, políticos, económicos, sociales y culturales)”, advierte.
Subraya que a nivel institucional, el Tribunal Constitucional se compone de representantes de instancias políticas y judiciales de República Dominicana.
“Desde un punto de vista político, las tres ramas del poder dominicano se pronunciaron una tras otra a favor de la sentencia, por no mencionar el partido político en el poder, el PLD, y los líderes de este país, cuyo expresidente Leonel Fernández, apoyó la sentencia y la defendió con uñas y dientes. A pesar de la protesta en contra de esta decisión inaceptable, las autoridades dominicanas continúan aplicándola. Acaban de legitimarla y consolidarla”, dijo el profesor Denis.
Denis, definido por Le Nouvelliste, como un fino conocedor de la historia de ambos países, centró su intervención en el análisis de la ley Medinam (Ley 169), la que a su juicio despertó tantas esperanza para terminar decepcionando a muchos.
El profesor dijo que de acuerdo con el artículo 3, la Ley de Naturalización no deroga ni condena la sentencia TC 068-13 del Tribunal Constitucional.
Afirma que la Sentencia 168 se mantiene como una espada de Damocles sobre las cabezas de unas 210, 000 personas desnacionalizadas, y que podrá utilizarse opcionalmente para todos los fines.
“El Gobierno ha establecido dos tipos de desnacionalizados: los que obtuvieron documentos legales y administrativos del Estado dominicano después de su nacimiento y que siempre han vivido como dominicanos durante toda su vida. Y los que no tienen documentos, pero que nacieron en suelo dominicano. Estos últimos deberán presentarse inicialmente para solicitar la residencia legal, y una segunda vez, dentro de un período de dos años, para adquirir la naturalización o ciudadanía”, dijo.
“El dispositivo para la solicitud de naturalización es harto sorprendente. Aquel que no tenía ninguna identificación, aunque hubiera nacido en suelo dominicano, debe pasar de la nacionalidad de origen a la nacionalidad adquirida, haciendo primero una solicitud de residencia legal”, dice el Dr. Denis.
“El proceso de recuperación de la nacionalidad y la solicitud de la residencia legal aún no se han establecido; hay que esperar hasta la publicación de los reglamentos de esta ley dentro de unos 60 días, o dos meses, a partir de la fecha de publicación de la ley Medina. Todavía hay que esperar un rato. Con este fin, todavía tenemos que estar atentos porque la batalla se ve difícil y larga", expresó.
A su juicio Haití debe defender a los desnacionalizados de ascendencia haitiana por cuatro razones: la sentencia es una violación de los derechos humanos; es una violación del derecho internacional; ha creado miles de apátridas, y “desde el punto de vista de la política exterior, Haití debe responder a su noble misión histórica de defender la libertad”.
El Dr. Denis agregó que la sociedad civil de Haití debe continuar con la movilización, concienciar a la población, denunciar las irregularidades reprehensibles e incluso tratar de influir en las autoridades políticas en su manejo del caso de esta sentencia que aun priva a 210,000 personas de su nacionalidad.
También pidió a las autoridades haitianas que mantenga una política de reconocimiento del derecho a la nacionalidad de los dominicanos de ascendencia haitiana, en virtud de los intereses fundamentales del Estado de Haití, hoy y mañana.
“No deben dar marcha atrás; las autoridades de Haití, a través de nuestra diplomacia deben buscar el apoyo de ciertas instituciones progresistas y democráticas de la comunidad internacional con estrategias diplomáticas, para ganar esta batalla histórica”, sostuvo.