WASHINGTON, EEUU.- La economía estadounidense se contrajo en el primer trimestre un 4.8% según el Departamento de Comercio, el porcentaje más acentuado desde la Gran Recesión de 2008 y que obedece a las secuelas del coronavirus SARS-CoV-2 que provoca la enfermedad COVID-19 y que prácticamente paralizó la industria y el comercio de ese país y de todo el mundo.
Es la mayor caída desde el último trimestre de 2008, cuando con el estallido de la crisis financiera que provocó la Gran Recesión la economía de EEUU se redujo a una tasa anual del 8,4%.
El 4.8% de contracción del período enero-marzo 2020 es solo un reflejo inicial de las repercusiones del mal y puso fin a la expansión más prolongada en la historia de EEUU que solo en el último trimestre de 2019 registró un crecimiento económico del 2.1%.
La contracción de 4.8% es menor a las estimaciones de hasta -15% barajadas hace un mes, porcentaje que ahora se prevé registrará el PIB de abril, debido a que son muchas las fábricas y los negocios no esenciales que están cerrados u operando a medio gas, lo que tiene al desempleo en niveles récord: más de 26 millones de estadounidenses ya han pedido ayuda por desempleo.
El Congreso de EEUU ya aprobó un paquete fiscal de alrededor de 3 billones de dólares y la Reserva Federal (FED, Banco Central de EEUU) redujo las tasas de interés a casi cero y reiteró su promesa de apuntalar la economía en medio de una pandemia que también plantea, admitió, “riesgos considerables” en el mediano plazo.
Habla la FED
“Estamos haciendo todo que podemos”, declaró el presidente de la Fed, Jerome Powell, que previó que la enfermedad tiene poder como para amenazar el crecimiento económico de EEUU durante todo el 2020.
Powell dijo que espera que el PIB del segundo trimestre se reduzca a una tasa de dos dígitos y que haya un aumento aún mayor del desempleo.
La Fed dijo que solo por “una demanda más débil y precios del petróleo significativamente más bajos" se está frenando la inflación y que, en definitiva, la crisis sanitaria “tendrá un gran peso sobre la actividad económica, el empleo y la inflación en el corto plazo, y plantea riesgos considerables para las perspectivas económicas en el mediano plazo”.
La actividad económica en Estados Unidos "caerá a una tasa sin precedentes" en el segundo trimestre de 2020, porque "está claro que los efectos en la economía son graves", explicó Powell en una rueda de prensa tras la reunión monetaria en la que dejó sin cambios los tipos de interés en el rango de entre 0,25% y 0%.
Remarcó la disposición de la Fed "a usar toda las herramientas disponibles para apoyar a la economía de Estados Unidos en estos tiempos desafiantes" y recordó que ya ha lanzado todo su arsenal monetario con compras masivas y sin límites de bonos y activos, así como varias inyecciones de liquidez para mantener operativo el sistema financiero en medio de las crecientes tensiones por el coronavirus.
No obstante, lanzó un mensaje acerca de los límites de la política monetaria y la necesidad de que el Congreso aumente el estímulo fiscal lanzado hasta el momento.
"Quiero subrayar que los poderes de la Fed son de préstamo, no son poderes de gasto. Conseguir un préstamo que puede ser difícil de pagar puede no ser la solución (…) el apoyo directo fiscal podría ser necesario", agregó.
Por ello, advirtió que "la gravedad de la recesión dependerá de las acciones políticas adoptadas a todos los niveles de Gobierno".
"Los bajos tipos de interés persistirán probablemente por al menos los dos próximos años, mucho después de que la amenaza inmediata del virus se haya disipado", vaticinó a su vez Lauren Goodwin, economista del fondo de inversiones New York Life Investments en una nota a clientes.
Estados Unidos, que registra ya un millón de casos de COVID-19 y casi 60 mil muertos, se prepara para una recesión no vista desde la década de 1930.
Por ahora, el Congreso de EEUU ha aprobado ya cuatro paquetes de rescate económico por valor de casi 3 billones de dólares adicionales, entre ellos transferencias directas de efectivo a los ciudadanos y subsidios a pequeñas y medianas empresas.
"Estamos poniendo una cantidad sin precedentes de ayuda fiscal en la economía Se van a ver billones de dólares en la economía y creo que esto va a tener un impacto significativo", apuntó este domingo Steven Mnuchin, el secretario del Tesoro.
Sin embargo, los líderes republicanos, con mayoría en el Senado, han expresado su rechazo a apoyar a las autoridades estatales y económicas en apuros para evitar engordar la ya abultada deuda del país.
La próxima reunión de la Fed tendrá lugar el 9 y el 10 de junio, en las que presentará sus nuevas proyecciones macroeconómicas.
Wall Street cerró con sólidos avances en sus tres principales indicadores
Paralelamente, Wall Street cerró este miércoles con sólidos avances en sus tres principales indicadores. En el caso del Dow Jones de industriales fue del 2,21 %, en una jornada marcada por esperanzadores avances en la investigación del coronavirus.
Al término de las operaciones en la Bolsa de Nueva York, el Dow Jones ascendió 532,31 puntos y se situó en 24.633,86 enteros, aupado por grandes empresas financieras como American Express (8.95 %) y Visa (6,18 %) además del sector energético, liderado por Exxon Mobil (5,51 %) y Chevron (5,25 %).
El selectivo S&P 500 escaló un 2,66 % o 76,12 puntos, hasta 2.939,51 enteros; y el índice compuesto del mercado Nasdaq, que aglutina a las principales tecnológicas, avanzó un 3,57 % o 306,98 puntos, hasta 8.914,71enteros.
La buena sesión del miércoles supone que el S&P podría marcar su mejor mes desde 1974, ya que por el momento, desde el 1 de abril acumula subida de más del 13 %.
Por su parte, el Dow también está camino de registrar el mejor mes desde 1987, al haber avanzado un 12,4 % en lo que va de abril.
Medicamento remdesivir cumplió con los objetivos iniciales
En concreto, Wall Street se vio animado este miércoles por los resultados de un estudio del Instituto Nacional de Enfermedades Infeccionas y Alergias de EEUU que revela que el medicamento contra el coronavirus remdesivir, de la biofarmacéutica Gilead, cumplió con los objetivos iniciales.
Gilead por su parte también publicó sus propios resultados, que muestran mejoras en aquellos pacientes de COVID-19 que tomaron el medicamento, lo que llevó a las acciones de la empresa a subir un 5,7 %.
Mientras, el principal experto en enfermedades infecciosas de EEUU, Anthony Fauci, señaló que el remdesivir muestra "claros" efectos positivos en pacientes que están siendo tratados por el virus.
Los analistas no se mostraban sorprendidos por este tipo de reacciones del mercado ante noticias de avances en la lucha contra el coronavirus: "Los mercados se van a mover así con este tipo de noticias", dijo a los medios especializados Megan Horneman, la directora de estrategia de Verdence Capitol Advisors.
También contribuyó al buen día el crudo de referencia en EEUU, que se disparó un 22,04 % este miércoles y cerró en 15,06 dólares el barril, en una jornada marcada por la confianza de los inversores en que las economías mundiales reabran antes de lo esperado
La mayoría de los sectores cerraron con ganancias y los mejores resultados recayeron en el energético (7,35 %), telecomunicaciones (5,05 %), tecnológico (4,22 %) y el financiero (3,01 %), pero otros como el de servicios públicos (-0,92 %) y el de bienes de consumo esenciales (-0,41 %) cerraron con pérdidas.
En otros mercados, el oro subía a 1.729,20 dólares la onza, el rendimiento del bono del Tesoro a 10 años avanzaba al 0,627 % y el dólar perdía terreno frente al euro, con un cambio de 1,0875. (Con informaciones de EFE y DW)