Andrew Desiderio/ Traduccción Iván Pérez Carrión
En un movimiento dramático que podría presagiar la aprobación de un importante paquete de reforma migratoria en las próximas semanas, la administración Trump delineó el jueves un conjunto de propuestas de políticas que dan un terreno serio a los defensores de la reforma pero preserva algunos de los esfuerzos del presidente Donald Trump para frenar la inmigración legal .
El marco legislativo de la administración para una ley de inmigración bipartidista incluirá un camino hacia la ciudadanía para 1,8 millones de personas, dijo el jefe de políticas de la Casa Blanca, Stephen Miller, durante una conferencia telefónica indirecta que incluyó asistentes republicanos de Capitol Hill.
Miller, describiendo el bosquejo de la Casa Blanca como uno que incluye "disposiciones extremadamente generosas" y "dramáticas concesiones" a los demócratas, dijo que el plan de la administración permite que 1.8 millones de inmigrantes indocumentados tengan un camino a la ciudadanía estadounidense si tienen "historial laboral, el derecho" cantidad de educación y buen carácter moral ".
Ese número incluye a las casi 700,000 personas actualmente protegidas por el programa de Acción Diferida para la Llegada de la Infancia (DACA) de la era Obama, más las personas que no solicitaron DACA "sino que cumplían con sus requisitos", según Miller.
Miller habló en una llamada de información para sustitutos de la Casa Blanca, miembros del Congreso y su personal. The Daily Beast obtuvo un código de acceso para la llamada de prensa cerrada, pero no de la Casa Blanca. La llamada se realizó "en segundo plano" por el host. Pero como The Daily Beast no fue invitado a la convocatoria, no aceptamos cumplir con esas condiciones.
Un documento distribuido por cabilderos de inmigración, del cual se proporcionó una copia a The Daily Beast, dice que el camino a la ciudadanía se llevaría a cabo en un período de 10 a 12 años.
El marco legislativo, que se publicará en su totalidad el lunes, también incluye $ 25 mil millones en fondos para medidas de seguridad fronteriza, incluido un "sistema de muros". Miller dijo que el plan también incluye una "inversión histórica en la seguridad de la frontera norte".
