Santiago (R.Dominicana), 23 oct (EFE).- Una tensa calma impera hoy en varios municipios de la región norte de la República Dominicana que desde ayer son escenarios de violentas protestas que han dejado un saldo de cuatro muertos y varios heridas y decenas de detenidos en demanda de un pliego de reivindicaciones sociales.

En el municipio de Navarrete y el sector Ciruelitos, de la provincia de Santiago (norte) y en San Francisco de Macorís (noreste), desconocidos quemaron neumáticos, pero con el paso de las horas el ambiente se ha calmado.

No obstante, tropas especializadas de la Policía Nacional portando armas largas y gases lacrimógenos se mantienen apostados en calles y lugares estratégicos para prevenir desórdenes.

En el barrio Ciruelitos, de Santiago, fueron sepultados dos de las víctimas, de cuyas muertes sus familiares y grupos populares culpan a la Policía, que nuevas protestas.

El jefe de la Dirección Cibao Central (norte) de la Policía Nacional, Neivis Luis Pérez Sánchez, dijo que seis agentes de esa institución, incluyendo tres oficiales, resultaron heridos en las protestas de los Ciruelitos, donde hubo dos muertes.

Pérez Sánchez identificó a los agentes heridos como el coronel Ramón Azcona Reyes, los tenientes Oscar Núñez Ozoria, Alberto Hernández Céspedes y el sargento Henry Rivas García y otros dos que no identificó.

Manifestó que el coronel Azcona Reyes resultó herido en el ojo izquierdo, producto de una bomba de fabricación cacera lanzada por manifestantes, mientras que los tenientes Núñez Ozoria y Hernández Céspedes, fueron impactados en el tórax y la pierna izquierda, al igual que el sargento Rivas García.

El oficial definió las protestas como hechos de bandolerismo y advirtió que la Policía no tolerará ese "bandidaje".

Asimismo, agregó que grupos antisociales se aprovechan de esos disturbios para cometer actos reñidos con la ley, pero insistió den que tendrán de frente a la Policía Nacional.

Sostuvo que los agentes policiales que ha sido heridos en las protestas trataban de impedir que los manifestantes ocuparan importantes avenidas de Santiago, para crear caos y tensión en la población.

Pérez Sánchez agregó que los manifestantes, algunos encapuchados, tenían la intención de matar a los agentes en el sector Ciruelitos, pero que eso no lo va a permitir el cuerpo del orden.

Lamentó las muertes de los Ciruelitos y Navarrete en medio de las protestas están siendo investigadas, pero rechazó que se les pretenda atribuir a miembros de esa institución.

De su lado, el portavoz del Frente Amplio de Lucha Popular (Falpo) en San Francisco de Macorís, Raúl Monegro, dijo que se mantienen firmes en las calles y que la convocatoria a huelga por 48 horas se cumple en esa ciudad, pero pacíficamente.

También explicó que la muerte de Wilson David Camilo Escaño, de 25 años, se produjo en una zona aislada de las protestas, pero que la Policía pretende achacársela a los grupos populares.

El líder popular explicó que el hombre murió cuando un individuo le disparó desde una motocicleta en marcha, pero que ahora la uniformada pretende atribuir el hecho a los movimientos de protestas.

Subrayó que hoy el comercio, la docencia y todas las actividades se encuentran paralizadas y el transporte público y el tránsito es nulo, fruto del llamado a huelga que se cumple por segundo día en San Francisco de Macorís. EFE