SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Kelvin Enrique Fernández Flacquer (alias Cotto), decidió acogerse de manera voluntaria al proceso de extradición simplificada que solicitó Estados Unidos por supuesta asociación delictiva para distribuir, importar y poseer con intención de distribuir cocaína en la red que dirigía el narcotraficante César Emilio Peralta (César el Abusador).

Este jueves la Segunda Sala Penal de la Suprema Corte de Justicia (SCJ), presidida por el magistrado Francisco Antonio Jerez, conoció el caso, ante lo que el imputado no presentó oposición, por lo que pasará al Tribunal del Distrito sur de Florida.

“Siempre ha sido mi intención cumplir sin evadir la justicia”, expresó  Fernández Flacquer al manifestar su posición ante los jueces.

Dijo que tan pronto se enteró de que tenía requerimientos de las autoridades estadounidenses se puso a disposición y se entregó ante la Dirección Nacional de Control de Drogas (DNCD) para responder por los hechos que se le imputan.

Fernández Flacquer se mantendrá en la sede central de la DNCD hasta tanto se complete el proceso de extradición.

A petición del pedido en extradición, Ingrid Hidalgo, su representante legal, pidió que se tome en claro que el proceso al que accedió someterse su cliente está regido bajo el tratado de extradición entre Estados Unidos y República Dominicana en el cual, por ningún cargo, le podrían imponer una pena de más de 30 años.

Una vez Fernández dio a conocer la entrega voluntaria, el presidente de la Sala cuestionó si recibió algún tipo de presión para tomar la decisión, lo que Fernández negó.

Por su parte, el Ministerio Público se aseguró de que este tiene conocimiento de los actos que se le imputan.

Según las autoridades de los Estados Unidos, Kelvin Enrique Fernández Flacquer estuvo involucrado desde el 2005 hasta el 24 de octubre 2019, en actividades delictivas de una organización a gran escala con operación desde Colombia, República Dominicana, Bahamas, Puerto Rico y el sur de la Florida, cuya participación involucra entre 300 y 700 kilogramos de cocaína mensualmente.