NUEVA JERSEY, Estados Unidos.-El senador demócrata por este estado, Robert (Bob) Menéndez, tendrá que esperar hasta la próxima semana para saber si se desestimará alguno de los cargos de corrupción en su contra, pero este jueves se enteró de que su juicio no se iniciará el próximo mes como estaba previsto en un principio, según informó Herb Jackson de NorthJersey.com

El medio informativo explica que el juez de distrito William H. Walls aplazó el juicio hasta la próxima primavera -la fecha más próxima posible- y, posiblemente, hasta el otoño de 2016, después de un día de argumentaciones sobre las mociones por parte de los abogados de Menéndez y del coacusado Salomón Melgen.

“Ellos buscan descartar la totalidad o parte de la acusación, que incluye cargos de soborno, fraude electrónico, conspiración y la presentación de una declaración falsa”, precisa.

La información de Herb Jackson, de NorthJersey.com, detalla que Walls cuestionó fuertemente a los abogados defensores acerca de su argumento de que algunas de las pruebas de los actos oficiales de Menéndez a favor de Melgen deberían ser excluidos del caso debido a la cláusula “libertad de expresión o debate” de la Constitución de EE.UU., que protege al Congreso de las investigaciones por el poder judicial o el Departamento de Justicia.

Walls dijo que iba a pronunciarse sobre esta cuestión y las demás presentadas el jueves dentro una semana. El juez ordenó retrasar el juicio porque se espera que, sin importar la de qué manera Walls falle en cuanto a la discusión sobre la cláusula de expresión o debate, habrá una apelación ante el Tercer Tribunal de Circuito de Apelaciones, que por lo menos tomará varios meses.

Pero en una señal de que no se dejó influir por algunos de las 15 mociones de sobreseimiento interpuestos por los abogados defensores en julio, Walls distribuyó una copia de una caricatura del New Yorker que presenta a un abogado parado ante varios jueces con el pie: “¡Basta! No hagan preguntas constitucionales cuya respuesta no quieren saber”.

Walls también parecíó derribar los argumentos de la defensa de que el jurado se vio empañado por el mal procedimiento de la fiscalía porque un miembro del jurado al que se le preguntó si traerían a los testigos para testificar, dijo que no lo harían.

“Ustedes no va a ganar ese punto”, dijo Walls.

Los fiscales sostienen que Menéndez aprovechó su cargo para promover los intereses personales y de negocios de Melgen, incluyendo la defensa de Melgen en una disputa con el Medicare por US$9 millones, y haber conseguido visados para que novias extranjeras de Melgen viajaran a Estados Unidos, a cambio de viajes de lujo y más de US$1 millón en contribuciones a comités políticos que beneficiaron a Menéndez.

El abogado defensor Murad Hussain dijo que un fallo de la Corte Suprema que condujo a la explosión de los súper PAC (Comités de Acción Política) dijo que el dinero empleado en los gastos de campaña independientes no podía considerarse “corrupción”. No obstante, Walls apuntó que el tribunal tampoco dijo específicamente que ese tipo de contribuciones no podía considerarse soborno.

Sin embargo, la defensa argumenta que para que un pago sea un soborno tiene que haber un acuerdo explícito en el que esas acciones se tomarán a cambio de pagos.

"El gobierno no alegar porque no tiene pruebas de un acuerdo real entre el senador Menéndez y el Dr. Melgen", dijo Abbe Lowell, abogado defensor de Menéndez.

Walls pareció mantenerse impasible.

“El acuerdo se puede determinar circunstancialmente”, dijo Walls. “Se puede deducir un acuerdo a partir de los hechos”.

Partidarios de Menéndez han argumentado que en lugar de ser sobornos, algunos de los beneficios y acciones citados en la acusación fueron el resultado de una amistad de veinte años entre el senador y Melgen, pero Walls, de nuevo, fue escéptico.

“Los amigos pueden ser corruptos”, dijo Walls. “Yo puedo mencionarle amigos de la historia de la política de Nueva Jersey que eran corruptos”.

Walls también desafió al fiscal principal Peter Koski, un abogado principal de la Sección de Integridad Pública del Departamento de Justicia. Walls fue particularmente agresivo al cuestionar por qué una de las novias de Melgen, una de las beneficiarias de un visado que Menéndez ayudó a conseguir, sabía de la relación de Melgen con su esposa.

“¿Por qué el jurado tiene que escuchar eso?”, preguntó Walls.

Después de que Koski dijo que presentó pruebas sobre la relación corrupta entre Menéndez y Melgen, Walls presionó más, preguntando si tendría importancia que el beneficiario del visado fuera un pariente lejano de Melgen o su amante.

“¿Para qué toda esta cobertura al estilo del New York Post?”, preguntó Walls.