SANTO DOMINGO, República Dominicana.- El Juzgado de la Instrucción de la provincia Santo Domingo, reenvió el juicio preliminar del caso Natasha Sing y Suleika Flores para el 19 de junio del presente año tras la ausencia de la acusada principal y su prima así como de los abogados de otros imputados.

Los representantes legales de la familia Sing alegaron que además el Ministerio Público no les había entregado la acusación donde se incluyen ocho personas más dentro del caso, inculpados por ser parte de una red de sicariato.

“Tenemos ocho involucrados más que aun se encuentran en libertad, pero de alguna manera tuvieron un vinculo con la muerte de las dos mujeres. Sin embargo aun no daremos a conocer los nombres de los acusados hasta que no llevemos a cabo los apresamientos”, explicó Ernesto Féliz, abogado de la familia de Natasha Sing.

En cambio, el representante de Suleika Flores no solo informó existen ocho nuevo acusados si no que tiene constancia de cuatro más contra los cuales todavía no se ha presentado formal acusación.

“No puede ser que tantas personas estén en involucradas en la muerte de una mujer indefensa solo por asuntos pasionales, eso es mentira”

El padre de Suleika reclamó que a pesar de que ya pasó un año de lo sucedido, la justicia dominicana no ha determino el móvil real del hecho ya que según revela no fue un caso de asunto pasional si no que al parecer ella tenía conocimiento de negocios ilícitos del abogado Julio

“No puede ser que tantas personas estén en involucradas en la muerte de una mujer indefensa solo por asuntos pasionales, eso es mentira”, dijo Héctor Flores.

Aseguró que solo se retiraría del caso si se muere. “¿Sabes cuando me retiraré del caso?  Cuando me muera”.

En tanto, su esposa y madre de Suleika, Confesora Guzmán, expresó que no supera la muerte de su primogénita quien dejó en la orfandad un niño de dos años de edad.

Parte de los imputados son Jesús Manuel Mendoza Benítez (El Padrón), Amaury Santiago (Nevado), Luis Abel Mariano Pérez (Luisito), la abogada Sanhys Dotel Ramírez, principal imputada.

Sanhys Dotel Ramírez, de 43 años, es acusada de contratar  a varios presuntos sicarios para asesinar por encargo a las dos mujeres. Natasha Sing y Suleika Flores,  fueron asesinadas el pasado 7 y 28 de abril del 2014, respectivamente, la primera por error tras ser confundida con Suleika.

Dotel Ramírez habría pagado la suma de 400 mil pesos por la muerte de Suleika, pero como los sicarios le quitaron la vida a Natasha por error de dirección y fotografía, se vio precisada a pagar otra vez la misma cantidad, llegando a pagarles 800 mil pesos, según el expediente.

Tanto Suleika como Natasha residían en mismo complejo habitacional, Vereda Tropical, una frente a la otra. Suleika vivía en el apartamento 2D del edificio 7, mientras que Natasha habitaba en el apartamento 3A del edificio 4.