HOUSTON, EEUU.- Un incendio en una planta química cercana a la ciudad de Lake Charles, en Luisiana, ha obligado al gobernador del estado, John Bel Edwards, a pedir este jueves que se encierren en casa a los residentes de esta zona por la que horas antes pasó el huracán Laura, de categoría cuatro y luego degradada a tormenta tropical.

Edwards informó por Twitter de un "incendio químico" e instó a los habitantes de la zona de Westlake, Moss Bluff y Sulphur, en el sudeste del estado, a que se "refugien" hasta nuevo aviso y "cierren las puertas y ventanas".

Imágenes de medios locales muestran una espesa y negra humareda saliendo de las instalaciones, situadas en una zona con numerosas plantas químicas.

El gobernador pidió seguir las instrucciones de las autoridades locales, que han emitido órdenes de encerrarse en lugar seguro y apagar los aparatos de aire acondicionado hasta nuevo aviso, informó el canal KPLC.

Según la organización ambientalista Earth Justice hay 60 plantas petroquímicas y 49 sitios peligrosos, incluidas refinerías de petróleo, gas y química, en la trayectoria de Laura.

Horas antes de conocer la noticia del incendio químico, el grupo había advertido del peligro de derrame que entrañaba la llegada del huracán y su cercanía con el llamado "Callejón del Cáncer", donde viven muchas comunidades de bajos recursos y de grupos minoritarios que, según aseguran, han sufrido enfermedades mortales por causa de la industria contaminante.

Laura se degrada a tormenta tropical

Fotografía divulgada esta madrugada por el astronauta de la NASA Chris Cassidy en donde se aprecia el ojo del huracán Laura visto desde la Estación Espacial Internacional. El huracán Laura tocó tierra esta pasada madrugada cerca de Cameron, en la costa de Louisiana en el Golfo de México, y lo hizo como categoría 4 y vientos de 150 millas por hora (240 km/h). EFE/ Chris Cassidy Nasa

El huracán Laura tocó tierra en las primeras horas de este jueves en la costa de Luisiana con vientos máximos sostenidos de hasta 240 kilómetros por hora dejando al menos una persona muerta y luego se debilitó significativamente al degradarse en una tormenta tropical.

El potente sistema se debilitó a la categoría 2 este jueves por la mañana mientras se dirigía hacia el norte de Luisiana con vientos sostenidos de más de 160 kilómetros por hora, y en las últimas horas ha bajado aun más su intensidad.

Los vientos máximos sostenidos se encuentran ahora a cerca de 120 kilómetros por hora con ráfagas más fuertes, indica el Centro Nacional de Huracanes (NHC) en su más última actualización.

A las 12:00 hora local (17:00 GMT), el ojo de Laura fue localizado 80 kilómetros al este-sureste de la ciudad de Shreveport (Luisiana).

Se pronostica un debilitamiento rápido, por lo que se espera que esta noche se debilite hasta ser depresión tropical, según detalla el NHC, que tiene sede en Miami.

Laura se moverá sobre Arkansas esta noche, sobre el centro del Valle de Misisipi mañana viernes, mientras el próximo sábado, previo giro hacia el oeste, viajará con baja intensidad a los estados del Atlántico medio, pronostica el observatorio.

Laura, que ya dejó 21 muertos a su paso por Haití y otros cuatro en República Dominicana, causó al menos un fallecimiento en Estados Unidos.

Una niña de 14 años a la que se le cayó encima un árbol en el estado de Louisiana es la primera víctima mortal conocida en EE.UU. por el paso del poderoso huracán.

Con su antigua categoría 4, Laura fue la tormenta más potente hasta la fecha de la temporada de huracanes en el Atlántico.

Los otros huracanes han sido Hanna, Isaías y Marco, los tres de categoría 1. EFE