SAN FRANCISCO DE MACORÍS, provincia Duarte, República Dominicana.-Fueron condenados a 20, 12, 5 y dos años de prisión, seis hombres que fueron hallados culpables de haber incurrido en delitos de homicidio, homicidio voluntario, tentativa de homicidio y violencia de género e intrafamiliar en distintos hechos ocurridos en esta ciudad.
Las sentencias condenatorias fueron dictadas contra Ángel Gregory Minaya, alas Mata, y Jonathan de la Cruz Ortega, alias El Peluquero, quienes fueron condenados a 20 años de prisión por los delitos de homicidio y feminicidio, respectivamente, en tanto que Jorge María, alias Nene, fue condenado a 12 años de prisión por haberle ocasionado la muerte a su expareja.
Además, fueron sentenciados Francisco Henríquez Asiático y Juan Reynoso a cinco años de prisión por violencia de género e intrafamiliar, así como Andrés Vargas Ayala, alias El Chori, quien fue condenado a dos años de prisión por homicidio involuntario.
Las condenas fueron impuestas por tribunales de este departamento judicial que acogieron la petición hecha por la Fiscalía de la provincia Duarte, la cual demostró con diferentes pruebas documentales, materiales y testimoniales la comisión de los hechos atribuidos a los encartados.
La información indica que las sentencias serán cumplidas por disposición del tribunal en el Centro de Corrección y Rehabilitación Vista al Valle de San Francisco de Macorís, provincia Duarte.
Ángel Gregori Minaya fue condenado por haberle provocado la muerte a un menor de edad, mientras que Jonathan de la Cruz fue hallado culpable del asesinato de Johan Manuel de la Cruz, y Jorge María fue condenado por la muerte de Lady Miguelina Paredes Marte.
De Francisco Henríquez Asiático, se informó que incurrió en violencia de género contra su pareja y Juan Reynoso fue encontrado culpable de cometer violencia intrafamiliar en perjuicio de una hermana, mientras que
Andrés Vargas Ayala fue sentenciado por cometer un homicidio involuntario en perjuicio de Manuel Antonio Sánchez.
Las sentencias fueron emitidas luego que el Ministerio Público lograra que los tribunales acogieran la acusación que presentó en contra de cada uno de los encartados.