Puerto Príncipe/Santo Domingo (EFE).- El Gobierno de Haití destituyó al embajador en Santo Domingo, Daniel Supplice, por no haber defendido "apropiadamente" al país en medio de la crisis migratoria con República Dominicana, informaron a Efe fuentes de la cancillería haitiana.
Las citadas fuentes precisaron que Supplice ha sido destituido por "no haber defendido a su país apropiadamente" en sus distintas intervenciones públicas sobre la crisis migratoria que afecta a los dos países tras la finalización del Plan de Regularización de Extranjeros puesto en marcha por el Gobierno dominicano.
Supplice accedió al cargo a finales de febrero, en sustitución de Fritz Cineas, quien había estado en la RepúblicaDominicana ocho años y dimitió también en medio de las criticas de sus compatriotas por la supuesta lentitud con la que manejaba el proceso de entrega de documentos a los inmigrantes que querían regularizar su situación.
Además Supplice en una reciente entrevista con el diario haitiano Le Nouvelliste criticó a su propio país por el fracaso del Programa de Identificación y Documentación para los Inmigrantes Haitianos en República Dominicana (PIDIH), dirigido a facilitar el registro de sus compatriotas en el plan dominicano.
Supplice, diplomático de carrera, era considerado un estrecho colaborador del presidente haitiano, Michel Martelly, y ya había sido designado para el cargo de embajador en República Dominicana en marzo de 2013, pero las diferencias entre el gobernante y el Senado del país impidieron que asumiera entonces.
El destituido embajador será sustituido, provisionalmente, en el cargo por la actual ministra consejera de la legación, Magalie Magloire.
Hasta el momento el ejecutivo dominicano no se ha pronunciado oficialmente al respecto, pero tras conocerse la información la cancillería del país indicó en su cuenta de Twitter que actualmente no hay condiciones para llegar a un acuerdo por el conflicto migratorio con el otro país de isla La Española.
"La República Dominicana fortaleció sus relaciones bilaterales con Haití. Sin embargo, la actuación del Gobierno haitiano ha eliminado actualmente las condiciones" para el diálogo, según el ministerio dominicano.
Esta afirmación del Gobierno también llega un día después de que el primer ministro haitiano, Evans Paul, asegurara que "es difícil pedir a las víctimas que se disculpen con sus torturadores", en referencia a que Haití no tiene que disculparse por las críticas hechas a su vecino.
Cerca de 2.000 personas se manifestaron el martes por el centro de Puerto Príncipe en solidaridad con los dominicanos de ascendencia haitiana y los haitianos en República Dominicana.
El gobierno dominicano consideró que a Haití le toca hacer su tarea y dejar de tomar a la República Dominicana de "pretexto" para "evadir sus responsabilidades" frente a su pueblo.
En su opinión tienen que "ponerse a gobernar para su pueblo, creando oportunidades de inversión y de empleos para sus ciudadanos", garantizando el derecho a la educación y a la salud, dotando de documentos a sus nacionales y cumplir el compromiso de celebrar elecciones legislativas y municipales, según una nota del ejecutivo dominicano.
En una nota titulada "Haitianos sin papeles en República Dominicana. La verdadera historia", el gobierno del país recuerda que cuando, en agosto de 2012, el presidente Danilo Medina asumió el cargo sólo 2 de cada 10 extranjeros residentes en el país estaba en situación regular.
El resto, 8 de cada 10 y en su casi totalidad haitianos, estaba irregular, es decir, no tenia papeles dominicanos que explicaran o justificaran su estancia en el país.
La destitución de Supplice se produce cinco semanas después de que finalizara el plazo de presentación al Plan de Regularización, al que se sumaron más de 288.000 personas, la mayoría de ellos haitianos.
El Plan Nacional de Regularización dominicano ha despertado las críticas, entre otros, del Gobierno haitiano, que ha denunciado en foros internacionales la supuesta deportación de haitianos no regularizados, algunos de ellos nacidos en la República Dominicana, acusaciones negadas reiteradamente desde Santo Domingo. EFE