REDACCIÓN.-Un día como hoy en 1955 la rebeldía de una delgada mujer negra apuntaló la lucha por los derechos civiles en los Estados Unidos, dando lugar a una ola de protestas masivas para poner fin a la segregación de los negros y otras minorías étnicas, injustamente consideradas como personas inferiores.
Corría el 1 de diciembre de 1955, en Montgomery, Alabama, cuando Rosa Parks, que había salido extenuada de su jornada de trabajo decidió poner fin a siglos de abusos y violación de los derechos de los negros.
Abordó el autobús y tomó asiento como los demás pasajeros. Cuando el chofer le ordenó que obedeciera la ley de segregación, y que se trasladara hacia el fondo del vehículo para ceder el asiento a un hombre blanco, Rosa Parks dijo que no lo haría. Sacó fuerzas de lo más hondo de su ser y decidió que ya no permitiría semejante abuso.
En febrero de 2013, con motivo de la inauguración de un monumento en honor a Rosa Parks, en el Capitolio, el presidente Barack Obama expresó conmovido: “Yo estoy aquí por ella”
Fue arrestada por viola ley de segregación. Fue fichada como si se tratara de una delincuente y obligada a pagar una multa de catorce dólares.
Más allá de lo que podría esperarse. La valentía de Rosa Parks despertó a las minorías, sobre todo a la afroamericana.
Un joven pastor bautista, entonces desconocido, Martin Luther King Jr., se dio cuenta de que había llegado el momento de hacer algo más que predicar en el templo, y llamó a su pueblo a la resistencia pacífica, al boicot contra todas las políticas de exclusión y segregación.
Los afroamericanos y otras minorías se negaron a abordar los autobuses, entre otras protestas, como asumir las labores en las fábricas con la lentitud de las tortugas para bajar la productividad.
El boicot duró 381 días, hasta que las autoridades se vieron obligadas a abolir la ley local de segregación entre afroamericanos y blancos. Un año después, en 1956, el Tribunal Supremo declaró inconstitucional la ley de segregación.
Pero el movimiento por los derechos civiles ya no se detendría. El liderazgo de Martin Luther King Jr., junto a otros prominentes líderes como Malcolm X, Medgar Evers, Angela Davis, Bobby Seale, Edgar Nixon, Ralph Abernathy, Jesse Jackson y Ella Baker, terminaría por derribar todas las legislaciones y ordenanzas que excluían a los no blancos de los derechos civiles, como asistir a las mismas escuelas, universidades, iglesias y centros de diversión; poder votar y aspirar a cargos electivos. y poder casarse con la persona amada sin importar la diversidad étnica.
Rosa Parks pasó a convertirse en un ícono en la lucha por los derechos civiles en Estados Unidos y en un ejemplo universal de cómo la valentía de una persona puede dar el primer paso para comenzar o acelerar los cambios que reclama una sociedad.
Esta valiente mujer falleció el 24 de octubre de 2005 a los 92 años.
En febrero de 2013, con motivo de la inauguración de un monumento en honor a Rosa Parks, en el Capitolio, el presidente Barack Obama expresó conmovido:
“Yo estoy aquí por ella”.