SANTO DOMINGO, República Dominicana.-—“Guardia pero si me llevan para Haití eh a morirme que ustedes me van a mandar pa’ya, porque yo nunca he caído por esa tierra, yo ni se para donde voy”.
—“Cómo que tú no sabes para dónde vas? Te estás haciendo? Porque tú sabes muy bien que tú saliste de allá”.
—“Cuando vi que ya montaban a los demás para ser deportados para Haití me sentí triste, dije bueno ahora me van a llevar para Haití a mal pasar para allá, y yo no conozco a nadie en Haití y no se hablar creolé, sólo entiendo un poquitico”.
—“Yo soy de los Chicharrones, eso es un Batey más para allá del Ingenio Consuelo”.
—“Ellos llegaron, allá a Naíme, San Pedro de Macorís y todo el resto se embalaron y el Maestro (de la construcción) me preguntó, y tú estás legal que no te embala, y yo le dije que sí, que yo estoy legal, porque yo tengo mis papeles en los bolsillos”.
—“Y ellos, de que llegan (Migración), hubo un guardia que me agarra y me dice súbete Moreno, y yo saco mi cartera y le enseño mi identificación y él me dijo no, eh pa’yá que tú va, porque, que se yo si esa cédula es falsa”.
—“Yo le dije bueno pues está bien, vámonos”.
—“Cuando llegamos allá, en el coso de la Guardia, pregunto que dónde me van a depurar”.
—“Te vamos a llevar para Haina, para depurarte en Haina y me trajeron para acá, me agarraron a eso de la 4 de la tarde”.
—“Llegamos a Haina como a la nueve y pico de la noche, éramos 3, los otros eran haitianos y estaban ilegales, a pesar de yo enseñar la cédula no accedieron a dejarme, ello me cogieron la cédula, y vieron que yo soy dominicano, uno dijo: ah pero ese muchacho eh dominicano, pero aún así, porque ya habían reportado tres al jefe y no quisieron dar marcha atrás”.
—“Hoy, ellos me dijeron temprano, que la gente que vienen a depurar a los haitianos, ellos vienen temprano”.
—“Y yo le enseñé mi identificación, pero yo no soy haitiano, y me dijo, que entre par de horas, te venimos a buscar para que vayan a depurarte para mandarte para tú casa, pero tiene que venir alguien de tú familia a recogerte para que no te pase nada en el camino”.
—De San Pedro salimos sólo tres, de La Romana venían unos cuantos más y temprano se lo llevaron para Haití porque no tenían documentos”.
—“é’ta eh una cosa que yo no me explico porque no debería de ser así, de estar recogiendo a todo el mundo, porque el haitiano se reconoce y yo no soy haitiano”.
Son las palabras del dominicano, Juan A. Corporán luego de ser liberado del Centro de Detención de “Ilegales” de Haina, mientras respondía a las preguntas de Ana Belique, Rosa Iris Diendoni y Ana Geraldo, activistas por los derechos civiles de los dominicanos y dominicanas de ascendencia haitiana que la Sentencia 168-13 dejó apátridas y en riesgo de apatridía.
Juan nació en el Chicharrón de San Pedro de Macorís, es de esos dominicanos hijos o nietos de personas que vinieron desde mediados del siglo pasado de Haití a trabajar en República Dominicana, buscando siempre una mejor vida.
Juan sólo habla español, como lo habla la media del dominicano, no habla la lengua de sus abuelos, es como la mayoría de sus iguales, que apenas han salido de sus bateyes y mucho menos viajar a la tierra de sus abuelos o sus padres.
Juan trabajaba en una construcción como obrero cuando llegó el pasado jueves 27 de agosto un contingente de la Dirección General de Migración y le violaron sus Derechos Humanos y Civiles, primero al actuar prejuiciados por su color y fenotipo, 2do. al desconocerle la veracidad de sus documentos y 3ero. por detenerlo y trasladarlo injustamente a Haina.
A Juan, sólo por su color de piel, la policía a cargo pensó que no era dominicano, no le importó que Juan no corrió, que le mostrara su cédula de identidad, pero que además al hablar no le otorgarán credibilidad a lo que expresaba, si en su voz sale el acento tricolor, que lo muestra tan dominicano como los guardias que diciéndole “moreno” le hicieron subir a la “camiona” para ser deportado.
Cuántas preguntas surgen:
¿Van a detener a todos los “morenos” y “morenas” en RD porque se piense que son “haitianos o haitianas”?
¿Va a ser un patrón el desconocer los documentos que portan dominicanos “negros” y “negras”, como cédulas y actas de nacimientos? O en el caso de los nacionales haitianos que hayan iniciado el proceso de regularización, desconocerán el carnet o la hojita que indica que iniciaron el proceso?
¿A cuántos dominicanos y dominicanas negros han deportados para Haití y no han entendido explicaciones de que son nacidos en la tierra de Luperón, Minerva Mirabal y Caamaño? Ya la OIM en una encuesta realizada en la frontera encontró que “el 27 por ciento de los entrevistados afirmaba haber nacido en República Dominicana y el 3,8 por ciento del total declaraba tener un documento de identidad dominicano”, y aún así fueron deportados hacia Haití.
¿Qué sucede con los/las dominicanos/as que no tienen en lo inmediato a quien avisar, o recogerlo en “Haina”, que no tengan los recursos de moverse desde una lejana provincia a procurar su familiar?
¿Por qué si la Dirección General Migración detiene una persona en San Pedro de Macorís no lo regresa a su casa y en cambio no se pone a exigir que un familiar vaya a recogerlo?
¿Qué sucede con los dominicanos y dominicanas que no tienen contactos con entidades como Reconoci.do que puede dar la voz de alarma en las redes sociales e ir en auxilio de ese posible deportado/a?
¿Con qué instrumento legal cuenta la Dirección General de Migración para que unos de sus oficiales de la orden de que todo el que tenga perfil sospechoso aunque presente documentos sea llevado a Haina para ser depurado?
¿Sr. Presidente Danilo Medina, Sr. Director de Migración, a sabiendas de que la mayoría en RD es afro-dominicana, que es un perfil sospechoso?