REDACCIÓN.-El gobierno de Trinidad & Tobago está preocupado por los efectos de la sentencia del Tribunal Constitucional de la República Dominicana sobre los ciudadanos hijos de extranjeros que han sido despojados de su nacionalidad.

Según una información del periódico Trinidad & Tobago News, los funcionarios del gobierno de esas islas llevarán esa preocupación a la reunión del Consejo Permanente de la Organización de Estados Americanos (OEA), que se celebrará hoy, martes 29 de octubre, y que incluye en su agenda la sentencia del Tribunal Constitucional dominicano.

“Funcionarios oficiales de este país estarán presentes en una reunión hoy del Consejo Permanente de la Organización de los Estados Americanos (OEA) en Washington, y se espera que expresen su "profunda preocupación" por un fallo en la República Dominicana que niega la ciudadanía a hijos de haitianos migrantes, informó el ministro de Asuntos Exteriores Winston Dookeran”, explica el medio.

Señala que en un breve mensaje electrónico al Newsday, explicó que se espera que la cuestión se plantee en la reunión de la OEA de hoy, y que las autoridades de este país “expresen nuestra profunda preocupación por los acontecimientos".

Explica que también espera que se reconozca la reunión en la cual se trató el tema, con la participación del primer ministro de Trinidad & Tobago, Kamla Persad-Bissessar, y el Ministro de Relaciones Exteriores de Haití, Pierre-Richard Casimir, celebrada recientemente en Trinidad.

Dookeran informó que en la reunión de la OEA hoy los funcionarios “también reconocerán que es un asunto interno de la República Dominicana y que esperamos que se resuelva internamente”.

Los funcionarios locales también “expresarán nuestro profundo sentir de que cualquier violación de los derechos humanos que pueda surgir a partir de esta decisión debe ser rechazada en los canales adecuados".

Señaló que el Ministerio de Asuntos Exteriores se ha puesto en contacto con la OEA y con el Secretariado del CARICOM en Georgetown y "pedimos a ambos que sigan observando la situación de cerca y que atiendan cualquier posibilidad de mediación que puede llegar a ser necesaria, pero en este momento creemos que todas las partes están tratando de encontrar una solución".

El Tribunal Constitucional de República Dominicana, país que comparte la isla con Haití, ha sentenciado que los hijos de inmigrantes haitianos indocumentados nacidos a partir de 1929 sean despojados de su ciudadanía.

A causa de la sentencia, perderán su derecho al voto, así como el acceso a la matrícula básica en las universidades estatales y el seguro de salud pública para los ciudadanos de bajos ingresos.

El Primer Ministro de San Vicente y las Granadinas, Dr. Ralph Gonsalves, ha condenado públicamente esa acción de la República Dominicana.

Avonelle Hector-Joseph, fundadora de la ONG Is There Not a Cause (Es que No Hay Una Causa; ITNAC, por sus siglas en inglés), que ha estado trabajando en Haití desde hace años, dijo al Newsday que respetaba la postura de Gonsalves, que él no tenía miedo de ponerse de pie y “desafiar al sistema". Ella también llamó al gobierno de este país y al CARICOM a condenar públicamente la sentencia.

“Estamos hablando de la vida de miles y miles de personas”, subrayó.

Hector-Joseph dijo que ha estado molesta por “largo tiempo” porque sus hermanos haitianos estén “sin estatus" en un país que es considerado parte del CARICOM.