PUERTO PLATA, República Dominicana (EFE).- Las investigaciones en torno a la desaparición de dos cajas fuertes conteniendo dinero (RD$60 millones) y joyas en la residencia de un alemán requisada por la Policía Nacional (PN) dominicana el 16 de octubre del 2012 en el sector Mulata III (Sosúa, Puerto Plata) -en la que murió una persona y otras dos resultaron heridas- están muy avanzadas.

La representante del Ministerio Público admitió hoy, en declaraciones a "Puerto Plata Digital", que no ha estado presente desde el inicio de la pesquisas en la casa del alemán Peter Brunck y en el que murió su compatriota Peter Ebert Demetrick, en un supuesto intercambio de disparos y en un acto en el que otros alemanes resultaron heridos.

A este respecto señaló que mañana, miércoles, tendrá un encuentro con representantes de medios de comunicación a los que ofrecerá mayores detalles del caso y que espera que a partir de su intervención queden aclaradas muchas cosas.

"Mientras tanto, puedo adelantar que las investigaciones sobre la desaparición de dos cajas fuertes de la residencia allanada van muy adelantadas y esperamos tener las conclusiones a manos en los próximos días", dijo la fiscal Núñez al citado diario digital.

A su vez, negó categóricamente que el día que se produjeron los hechos en la residencia del alemán -en residencial La Mulata III de Sosúa-, haya delegado al capitán Gerson Acosta, en ese entonces jefe de Investigaciones Criminales, de la Policía Nacional en Sosúa, funciones que eran del Ministerio Público.

Subrayó que a ese oficial, la fiscalía solo entregó copias de las seis órdenes de allanamientos autorizados minutos antes por la Oficina Judicial de Servicio de Atención Permanente del Distrito Judicial de Puerto Plata.

La fiscal recordó que cerca de la 12 de la noche del 16 de octubre del año pasado, el juez de la Atención Permanente actuante, expidió las órdenes para requisar las viviendas, de las que se tenían informes de que eran utilizadas para guardar armas de fuego ilegales de diferentes calibres.

En ese contexto, refirió que las autorizaciones fueron recibidas por el fiscal adjunto Wilfredo Martínez, que procedió a entregar las copias al capitán Acosta Polanco.

"Pero nunca los originales, como se ha dicho públicamente queriendo aparentar algo que no es real", aclaró.

La magistrada Núñez informó que en la madrugada del día siguiente, los fiscales adjuntos Juan Carlos Hernández, José Martínez Montán y Ramón Cabrera, fueron al destacamento de la policía de Sosúa, donde se integraron tres grupos encabezados por ellos, quienes de inmediato se trasladaron al residencial La Mulata III, donde se produjeron los hechos. EFE