Brasilia, 15 mar (EFE).- El fiscal general de Brasil, Rodrigo Janot, que el martes pidió a la Justicia la apertura de 320 investigaciones con base en las confesiones de exdirectivos de la constructora Odebrecht, asegura que lo revelado en las delaciones muestra un nivel de corrupción "jamás imaginado".
Janot alertó de la gravedad del caso en un comunicado interno sobre las investigaciones que envió el martes a los miembros de la Fiscalía y cuyo contenido fue divulgado hoy por el diario O Globo.
El procurador general de la República (Fiscal) afirmó en su carta a los fiscales que los ejecutivos de Odebrecht revelaron "detalles de la corrupción en nuestro país de forma jamás imaginada" y que evidencian "una democracia bajo ataque y, en gran medida, comprometida en su esencia por la corrupción y por el abuso del poder económico y político".
Las delaciones de los 77 exdirectivos de Odebrecht son la base de las 320 peticiones de investigación que el fiscal envió el martes a la Justicia, entre ellas 83 remitidas directamente a la Corte Suprema porque implican a políticos con fuero privilegiado.
Según versiones de prensa, los ejecutivos de la constructora revelaron la lista de políticos de todos los partidos a quienes hicieron donaciones electorales ilegales o sobornaron a cambio de adjudicarse contratos públicos.
Pese a que los testimonios de los ejecutivos y las peticiones de investigación están bajo reserva, fuentes de la Fiscalía revelaron a diferentes diarios locales que las denuncias alcanzan al menos a cinco ministros, seis senadores, un diputado y los expresidentes Luiz Inácio Lula da Silva y Dilma Rousseff.
Los ministros en la mira de la Fiscalía, según coinciden los diarios que tuvieron acceso a las denuncias son los de la Presidencia, Eliseu Padilha; Relaciones Exteriores, Aloysio Nunes; Secretaría General de la Presidencia, Wellington Moreira Franco; Ciencia y Tecnología, Gilberto Kassab; y Ciudades, Bruno Araújo.
Entre los senadores destacan Aécio Neves y José Serra, que han sido candidatos a la Presidencia por el Partido de la Social Democracia Brasileña (PSDB), así como varios de los principales líderes del Partido del Movimiento Democrático Brasileño (PMDB), la formación liderada por el actual presidente brasileño, Michel Temer.
Igualmente figurarían en la llamada "lista de Janot" de políticos con fuero privilegiado contra los que se pide la apertura de investigaciones los actuales presidentes del Senado, Eunicio Oliveira, y de la Cámara de Diputados, Rodrigo Maia.
En su comunicado interno, el fiscal asegura que el Ministerio Público "no tiene y jamás podría tener la finalidad de criminalizar la actividad política".
Agrega, no obstante, que las investigaciones solicitadas representan "una oportunidad" de "depurar" el proceso político y diferenciar a "aquellos que creen verdaderamente que es posible hacer política sin crimen y que la democracia no es un juego de fraudes", "sino un valor esencial a la sociedad moderna".
Janot agregó que la Fiscalía tiene tanto el desafío de mantener la "imparcialidad ante las disputas político-partidarias" como de "velar por la cohesión interna".
"No tenemos la llave mágica para la solución de todos los problemas revelados con el Lava Jato (como es conocido el proceso por los desvíos en la petrolera Petrobras), especialmente ahora, con la colaboración de Odebrecht, pero, en la parte que nos corresponde, les aseguro que seguiré conduciendo el caso bajo la mira exclusivamente jurídica y con la imparcialidad que se exige para cualquier miembro del Ministerio Público".
Las peticiones de apertura de procesos contra políticos aforados fueron enviadas al magistrado Luiz Edson Fachin, el instructor del proceso de corrupción en Petrobras en la Corte Suprema y quien tendrá que decidir si autoriza las investigaciones.
Fachin también tendrá que responder a la petición de la Fiscalía para que sea levantado el sigilo que protege las 950 declaraciones de los ejecutivos de Odebrecht y el que impide que los nombres de los acusados sea divulgado públicamente. EFE