La Octava Sala de la Cámara Penal, fijó el conocimiento del juicio de fondo sobre la demanda de difamación e injuria en contra de cinco reconocidos comunicadores por el sacerdote de la Iglesia Católica, Manuel Ruiz, para el jueves 3 de marzo.
Durante más de cinco horas, el juez Teófilo Andújar escuchó la presentación de la acusación formal y los alegatos presentados por la defensa, donde los segundos argumentaron se trata de una persecución insólita debido a los tres rechazos anteriores por parte de otros tribunales.
Posteriormente, la defensa advirtió nuevamente que lo ocurrido se podría calificar como doble persecución contra los periodistas acusados de difamación e injuria, entre otros delitos, Marino Zapete, Altagracia Salazar, Diana Lora, Franklin Guerrero y Juan Tomás Dottin Reyes.
Durante la presentación integra de la acusación, también declararon los acusados quienes mantienen el criterio de ejercer su derecho a la libre expresión como representantes de la ciudadanía.
Parte de las acusaciones contra los comunicadores se centran en los supuestos comentarios emitidos por estos sobre los casos de las violaciones de niños cometidas por el exnuncio Joseph Wesolowski, en la capital, y el sacerdote Wojciech Waldemar (padre Alberto Gil), en la comunidad de Juncalito, las cuales fueron comprobadas. En Polonia, a Wocjciech se le abrió una investigación. Por su lado, Wesolowski fue hallado muerto en Roma cuando estaba en proceso judicial.
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