WASHINGTON, EEUU.- El principal responsable de la lucha contra el coronavirus en Estados Unidos, Anthony Fauci, alertó que el país está yendo en la "dirección equivocada" para contrarrestar los estragos de la nueva ola de la COVID-19 que se ha extendido con la llegada de la variante delta y la reticencia de muchos estadounidenses a recibir la vacuna.
"Es realmente una pandemia entre los no vacunados, por lo que es un problema predominantemente entre ellos, esa la razón por la que estamos ahí, prácticamente suplicando a las personas no vacunadas que salgan y se vacunen", ha explicado Fauci durante una entrevista para la cadena CNN.
Cuestionado sobre la posibilidad de que Estados Unidos pudiera volver a registrar picos de hasta 4.000 muertes diarias por culpa del coronavirus, Fauci ha alertado de que en caso de llegar a esas cifras los mayores perjudicados sería las personas que no se han vacunado, aproximadamente la mitad de la población.
"No estoy seguro de si este sería el peor de los escenarios posibles, pero no va a ser bueno. Vamos en la dirección equivocada", ha señalado.
De acuerdo con las datos de los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos, treinta estados aún tienen que suministrar las dos dosis de la vacuna a la mitad de sus residentes.
Fauci tampoco ha descartado la posibilidad de suministrar una tercera dosis de la vacuna, principalmente para personas en situación de riesgo, ya que el creciente aumento de reinfecciones en aquellos que habían logrado la pauta completa "podría llevarnos en esa dirección" así que "probablemente suceda".
Al mismo tiempo, Fauci también ha defendido la decisión de algunas autoridades locales, como las del condado de Los Angeles, en California, de decretar el uso obligatorio de la mascarilla en espacios cerrados para aquellos que han recibido ambas dosis de la vacuna y asegura que directrices de este tipo "no son incompatibles" con las de los CDC pues responden a una cuestión de "prudencia".
Esta semana, la directora de los CDC, Rochelle Walensky, volvió a recalcar que no es necesario que las personas vacunadas utilicen la mascarilla, aunque reconoció que hacerlo conlleva "algunas ventajas".
La semana pasada Estados Unidos contabilizó sus peores números desde hace tres meses, con un aumento de los casos semanales cuatro veces mayor con respecto al mes anterior, en especial por la variante delta, responsable de la mayoría de los nuevos contagios, registrados sobre todo en aquellos estados con tasas de vacunación más bajas. (EUROPA PRESS)