SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Como un tsunami, la última ola de repudio levantada sobre la cabeza del presidente de la Cámara de Diputados, Radhamés Camacho, regresó la noche del lunes donde comenzó la noche del domingo: en el Estadio Quisqueya.

Luego de que se detuvo a un joven que supuestamente llamó “corrupto” al legislador en las tribunas del campo de juego, la autoridad parlamentaria fue tendencia durante el día en la red social Twitter con la etiqueta #CamachoCorruptoChallange, pero ya la noche del mismo día fue blanco (ausente esta vez) de un repudio menos virtual: en el Estadio Quisqueya retumbó con mayor fuerza la acusación como lo muestra el video:

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Máximo Eladio Romero Marcial, de 32 años, ya recuperó su libertad pura y simple tras pasar la noche en prisión y hasta casi el mediodía por la acción en contra del tercer cargo más importante del país, miembro del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) al igual que los dos primeros: el presidente, Danilo Medina, y la vicepresidenta, Margarita Cedeño.

Radhamés Camacho se desligó del apresamiento arbitrario -el joven le habría expresado que debía compartir unas cervezas con los fanáticos con todo el dinero que había acumulado- y alegó que se trató de un procedimiento rutinario de la seguridad privada del estadio que actuó ante una “conducta desordenada”, pero fue rápidamente desmentido.

El encargado de seguridad de la Liga Dominicana de Béisbol (LIDOM), Alex Báez, negó que fueron agentes bajo su mando quienes detuvieron al joven y que únicamente “la seguridad del estadio pasó por el asiento del fanático para que las cosas no pasaran a mayores inconvenientes, manifestándoles el fanático a la seguridad que no ha pasado nada”.

Agregó que al concluir el partido, Romero Marcial fue aprehendido por agentes de la Policía Nacional en el estacionamiento, sin intervención de la seguridad del Estadio.

Radhamés Camacho sostuvo en una rueda de prensa posterior que no ordenó la detención, que la prensa tergiversó lo ocurrido y, por último, alimentó la ola con una sentencia telúrica como si en la República Dominicana se cumpliera la máxima de igualdad que consagra la Constitución: «Aquí hay libertad de expresión, pero la libertad de expresión es de doble vía».

El asunto ya es tema de despacho internacional y, por ejemplo, la Agencia EFE difundió al mundo la siguiente versión:

Aficionados llaman "corrupto" a Camacho en el Estadio Quisqueya

Santo Domingo, 29 oct (EFE).- Un puñado de aficionados presentes este martes en el partido entre Águilas Cibaeñas y Tigres del Licey en el Estadio Quisqueya de la capital llamó "corrupto" al presidente de la Cámara de Diputados, Radhamés Camacho, quien no se encontraba en el lugar.

En imágenes divulgadas en las redes sociales el grupo también coreó "ladrón, ladrón, ladrón, ladrón", en actitud de protesta ante el arresto el domingo pasado de Máximo Eladio Romero luego de presuntamente llamar "corrupto" a Camacho, mientras este presenciaba en el mismo escenario el choque entre Leones del Escogido y el Licey.

El grupo de manifestantes, que vistió franelas blancas pintadas con el apellido "Camacho" y la palabra "corrupto", se colocó en los pasillos de la parte superior del área de preferencias del Quisqueya para desde allí realizar su protesta, mientras varios aficionados les filmaban y apoyaban su acción.

Horas antes del partido, la Liga Dominccana de Béisbol Profesional (Lidom) se reunió con los integrantes del grupo, quienes se comprometieron a realizar la protesta de manera pacífica.

El domingo pasado, Romero fue apresado por miembros de la Policía Nacional a su salida del estadio, para ser liberado al día siguiente sin la presentación de cargos.

El suceso se convirtió en tendencia en las redes sociales, donde Camacho se llevó la peor parte, pues recibió centenares de críticas que le culpaban del arresto del aficionado.

El presidente de los diputados, sin embargo, se desligó de su apresamiento y algunos legisladores salieron en su defensa, al considerar que Romero ofendió a Camacho. EFE