SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Con las medidas dispuestas por el Gobierno dominicano (al igual que en otros países), que gira en torno al distanciamiento social y las restricciones de movilidad, los ciudadanos se han visto obligados a enfrentarse al encierro como un desafío adicional.
El confinamiento interrumpió el comportamiento social de los dominicanos de forma drástica, un cambio que podría aumentar el estrés y la ansiedad en el entorno familiar.
Sin embargo, a pesar de la tensión que supondría el encierro, el tiempo dedicado al hogar sirvió para fortalecer los lazos familiares y personales, según datos recogidos por el Centro Económico del Cibao (CEC).
El 47.2 % de los consultados afirmó que permanecer en sus hogares por tanto tiempo, incluyendo las horas de trabajo, logró favorecer la comunicación con la familia. A este porcentaje le sigue el de quienes aseguraron que se mantuvo igual, en un 38.5 %.
Por otra parte, un 12.6 % de los entrevistados aseguró que la pandemia creó una brecha en sus relaciones familiares y 0.9 % terminó en divorcio.
Entre clases, de manera muy similar, los consultados aseguraron que la relación con su familia ha mejorado, en un 41.5 % en la clase alta, 47.7 % en la media y 48.6 % en la baja.
De igual manera, el porcentaje de los que dijeron que su relación permaneció igual en la clase alta, media y baja fue de 42.5 %, 35.7 % y 38.8 % respectivamente.
El distanciamiento familiar se dio en el 14.5 % de los encuestados de clase más acomodada, 14.3 % en la clase media y 11.1 % entre los de clase baja.
Para el 1.6 % de las personas encuestadas de mayor ingreso, permanecer en sus hogares por tanto tiempo, incluyendo las horas de trabajo, acarreó una ruptura en sus matrimonios. Lo mismo ocurrió en el 1.7 % de los consultados de clase media y en el 0.3 % de menor ingreso.
Relaciones personales
En las relaciones personales, el 60.3 % de los encuestados afirmó que continuó con su actual pareja durante la pandemia. El 14.5 % dijo estar soltero y buscó pareja, mientras que el 6.8 % se separó.
El 18.4 % dijo no saber o rehusó a responder sobre su situación sentimental durante la pandemia.
Por clasificación económica, el 57.5 % de encuestados con mayores ingresos indicó que continuó con su pareja. Asimismo lo hizo el 57.4 % de las personas consideradas clase media y 62.7 % en clase baja.
El 14.5 %, 12.9 % y 15.4 % correspondientes a clases alta, media y baja dijeron que estaban solteros y buscaron pareja, mientras que entre las mismas clases, el 9.3 %, 9.7 %, 4.4 %, afirmó que se separó de su pareja.
Entretenimiento
El entretenimiento ha sido fundamental para lograr cruzar las largas horas de encierro forzado por las medidas contra la covid-19.
Según los datos recabados por la encuesta de la CEC, ver televisión ha sido señalado con la actividad principal de los consultados como forma de entretenimiento, con 42.3 % que dijo que su consumo aumentó durante la pandemia.
Las redes sociales ocupan el segundo lugar, con el 30.6 % que aseguró que incrementó su uso.
Los quehaceres domésticos se posicionaron en el tercer lugar, con el 17.8 %, mientras que en un distante cuarto lugar hacer ejercicio se señaló como una actividad para ocupar el tiempo, con un 3.7 %. La lectura de libros y periódicos obtuvieron un 2.7 % y o.6 % respectivamente.
Sobre la encuesta
Para la realización de la encuesta, el Centro Económico del Cibao consultó a 1,200 personas mayores de 18 años residente en todo el territorio nacional, con entrevistas cara a cara, del martes 19 al jueves 21 de enero del 2021.
La muestra fue probabilística en todas sus etapas, seleccionando al azar, las viviendas y los entrevistados.
La encuesta tiene un nivel de confianza de un 95 % y un error muestral nacional de ± 2.8 %; La Gran Capital, ± 4.9%; la región Norte, ± 4.6 %; la región Sur, ± 6.7 %; y la región Este, ± 8.4 %. Las clases sociales se integran así: Alta 16.1 %; Media 29.2 %; Baja 54.7 %. Población urbana es 76.5 %; rural es 23.5 %.
El trabajo del CEC, empresa fundada en 1988 y dedicada a la realización de encuestas y estudios de mercado, con sede en Santiago, es parte de un convenio para la realización de estudios de opinión pública sobre temáticas diversas suscrito con Editora Acento, empresa de comunicación digital que edita el portal noticioso Acento y es propietaria del canal AcentoTV.