SANTO DOMINGO, República Dominicana.-La Iglesia Católica Dominicana asumió la práctica de ocultar los actos de pederastia de sus miembros, como lo hicieron otras iglesias en diversas partes del mundo, en procura de evitar las consecuencias morales y económicas que se derivan de las violaciones sexuales de menores.

La consideración la hizo la directora ejecutiva de la entidad Colectiva Mujer y Salud, Sergia Galván, que se dedica a promover políticas públicas en beneficio de la salud de la mujer y que promueve los derechos sexuales y reproductivos en la República Dominicana.

En una entrevista con Acento.com.do, Galván explicó el proceso de varias décadas desarrollado por la Iglesia Católica para proteger a sus miembros, y dijo que el caso de las denuncias de pederastias del ex nuncio apostólico en la República Dominicana es uno de los más serios y comprometedores del mundo, dado que quien cometió las violaciones es un diplomático importante, representante de dos papas en una nación que tiene un acuerdo, el Concordato, con el Vaticano.

La directora ejecutiva de la Colectiva Mujer y Salud dijo que la consecuencia inmediata que se deriva de estas denuncias es que el Estado denuncie al Vaticano y suspenda de inmediato el Concordato, porque de no haber existido ese acuerdo, que data de 1954, era posible juzgar al pederasta denunciado en los tribunales dominicanos.

Vea a continuación la entrevista: