Especial del Sistema de las Naciones Unidas en República Dominicana para Acento.com.do

Braulio Taveras es un súper papá, y no le hacen falta súper poderes para hacer lo que hace. Su clave mágica es brindar cuidados amorosos y protección a su pequeña hija Katly. Cada mañana Katly recibe los buenos días con una súper descarga de alegría. Braulio y Anileisy Mercedes, madre de Katly, juegan con su pequeña de ocho meses, le cantan y le dicen lo mucho que la quieren. Después de esos minutos de besos y sonrisas, Braulio y Anileisy masajean su cuerpo para ayudar a desarrollar el cerebro de su bebé de nuevas conexiones neuronales, tal como les enseñaron en el Centro de Atención a la Infancia y la Familia (CAFI), del INAIPI.

Es toda una fiesta en casa, mientras mami calienta el agua para el baño, papi va buscando el pañal y la ropita de Katly, cantando y riendo juntos. Papi y mami conforman un buen equipo para Katly. Con sus rutinas diarias, papi y mami se encargan de aportar al aprendizaje y crecimiento de Katly y que se sienta protegida, amada, sana, bien nutrida y estimulada para integrarse con su entorno social.

¿Y quién dijo que los Súper no han sentido miedo?

Al principio Braulio no se sentía seguro de tener un cuerpo tan pequeño entre sus brazos, “eso me ponía nervioso, tener esa cosita tan chiquita en la mano y Anileisy me decía: “Ven, báñala que tú tienes que aprender”. Sin duda, su dedicación y compromiso le permitieron aprender rápidamente y hoy en día Braulio es capaz de encargarse completamente del cuidado de la niña.

Pero la historia de Braulio no es la común en la mayoría de los hogares dominicanos. Según los datos de la encuesta  ENHOGARES MICS 2014, solo el 6,4% de los niños y niñas de 3 y 4 años en el país, ha interactuado con su padre biológico en actividades que promueven su desarrollo, como leer, contar cuentos, cantar, pasear, jugar, dibujar, entre otras.

Los avances en las investigaciones de la neurociencia han demostrado que en estos primeros años de vida es cuando el cerebro humano se desarrolla más rápidamente. Así, durante los primeros mil días (desde el embarazo hasta los dos primeros años de edad), las neuronas forman 1.000 conexiones por segundo, un fenómeno que no vuelve a ocurrir nunca más en la vida de una persona. Estos mil días son críticos y cualquier factor negativo, como la violencia, el abandono, la falta de cariño, la desnutrición, la exposición a estrés tóxico, algunos medicamentos, enfermedades y un medio ambiente deteriorado, puede tener un efecto irreversible.

Las conexiones neuronales o sinapsis son, además, la base sobre la que se asienta el desarrollo intelectual que determinará el buen desempeño durante la etapa escolar y el éxito profesional y laboral en la vida adulta. Además, el niño adquiere mayor autoestima, mejor adquisición de competencias sociales y mayor capacidad de adaptarse y de ser productivo.

“No se requieren súper poderes, todo lo que se necesita es cuidar la salud de los bebés, protegerlos, nutrirlos correctamente y estimularlos.”

Para que esto suceda no se requieren súper poderes, todo lo que se necesita es cuidar la salud de los bebes, protegerlos, nutrirlos correctamente y estimularlos. En otras palabras: dar de comer, amar y jugar con los hijos.

En estas tareas los padres juegan un rol importante. Aunque socialmente en República Dominicana la responsabilidad del cuidado y la atención de los hijos recae mayormente sobre las mujeres, es preciso que los hombres se integren en la crianza de los hijos e hijas.

Braulio, este súper papá, ve el machismo como la principal barrera que impide que los padres se involucren en la crianza de sus hijos e hijas. “Esta sociedad es muy machista, le deja todo a la mujer, piensan que la mujer es la que tiene que atender al niño y el hombre solo trabajar”.

Según Anileisy, Braulio es un padre ejemplar, “Él siempre se ha ocupado de la niña, no le apena, no le da vergüenza nada. Sobre todo, quiere mucho a la niña y eso es lo más importante. La cuida y siempre está pendiente de ella”.

Los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) plantean lograr para el 2030 que se garantice una educación inclusiva, equitativa y de calidad y se promueva oportunidades de aprendizaje durante toda la vida para todos (ODS 4). La meta es que durante la primera infancia todas las niñas, los niños y sus familias tengan acceso a servicios de cuidado y apoyo de calidad para lograr un desarrollo integral.

El Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (UNICEF) apoya al Instituto Nacional de Atención Integral a la Primera Infancia (INAIPI) en el fortalecimiento del Programa de Atención Integral de Base Familiar y Comunitario a través de los CAFI, para que las familias y comunidades favorezcan el desarrollo temprano de los niños y niñas de 0 a 5 años. Esto promoviendo que en la rutina diaria de los hogares se integren prácticas de crianzas adecuadas de salud, nutrición, protección, estimulación y educación. Pero sobre todo que los cuiden con amor.

Sobre la serie “Voces por el desarrollo sostenible”

Esta historia fue elaborada por UNICEF y forma parte de la serie de especiales para Acento, “Voces por el desarrollo sostenible”, para promover el debate sobre la Agenda 2030 de Desarrollo Sostenible. Se enmarca en el Objetivo de Desarrollo Sostenible (ODS) 4, Educación de calidad.