Franchesca Martínez/Especial para Acento.com.do
SANTO DOMINGO, República Dominicana.- Empresarios y comerciantes de la avenida San Vicente de Paúl exigen a la Oficina para el Reordenamiento del Transporte, OPRET, que se les indemnicen por los daños que ha provocado la construcción de la segunda línea del metro a sus negocios.
Dueños de negocios ubicados en la avenida San Vicente De Paúl, desde la carretera de Mendoza hasta la antigua rotonda de la carretera Mella, expresaron que están pasando por una difícil situación ya que han visto reducir sus ventas hasta un 80%, debido a los inconvenientes provocados por la construcción de la obra.
“A mi negocio ya no vienen clientes por el polvo, el lodo, y porque ya no tienen donde estacionarse debido a la construcción de la obra”, expresó Víctor Castro, comerciante.
Los mismos dicen sentirse preocupados al ver afectados sus negocios y en el peor de los casos, muchos de los empresarios se han vistos obligados a cerrar sus negocios debido a la falta de clientes.
Los afectados, manifiestan, que el polvo, los tapones, el ruido, el lodo, y el agua que cuando llueve penetra en sus negocios producto de la construcción, son los causantes de que hoy sus negocios estén a punto de desaparecer.
Afirman que no están en contra de la construcción, si no que exigen se les compense por los daños causados a sus propiedades.
Los negociantes afirmaron que la OPRET les hizo llegar una comunicación donde informaban a todos los comerciantes, los trabajos que en esa zona se iban a realizar y que por consiguiente sus negocios se iban a ver afectados, por lo que pedían a los mismos que hicieran llegar los inconvenientes provocados por la construcción a la OPRET, lo cual los comerciantes, según afirmaron, hicieron, sin que a la fecha se les haya dado respuesta.
El doctor, José Almonte, Director del Centro Médico Oriental es uno de los empresarios de la Zona Oriental que está siendo afectado por la construcción de la obra.
El galeno expresó que los propietarios de negocios que han sido afectados por la construcción de dicha obra se dirigieron hasta las oficinas de la OPRET para plantear su problema y estos quedaron de visitarlos y realizar un levantamiento, que aun están esperando.
Los propietarios han utilizado los letreros con la impresión “El metro quebró mi negocio”, como forma de llamar la atención de la prensa ya que las autoridades pertinentes hacen caso omiso ante la situación.
“Yo tengo siete meses que no trabajo, porque cuando llueve esto se pone insoportable. Si la construcción de la obra dura dos años o más me voy a quedar sin trabajo. Esta situación ha afectado hasta mi salud. Hay que ser consientes por Dios”, enunció, Juan José Ramírez, propietario de uno de los negocios.
Los afectados pidieron a la OPRET tomar cartas en el asunto ya que muchos de estos son padres de familia y que una desaparición total de sus negocios significaría dejar sin sustento a sus hijos.
