El coronavirus se ha cobrado la vida de más de 20 mil personas en Estados Unidos, que también es el primer país en casos positivos (503,594), según el recuento de la universidad con sede en Baltimore.
La pandemia ha dejado en Italia 18,849 muertos, según un recuento de la AFP en base a datos oficiales. La población del país europeo, sin embargo, es menos de una quinta parte de la de Estados Unidos.
En los últimos días las autoridades previeron que el COVID-19 sería el Pearl Harbor de esta generación, en alusión al ataque de Japón a ese territorio estadounidense en la II Guerra Mundial.
El presidente de EEUU, Donald Trump, dijo que el próximo martes anunciaría el lanzamiento de lo que llamó grupo de trabajo “Reabrir el país” para lograr el regreso a las actividades económicas, aunque agregó que “los hechos van a determinar lo que haga” ante lo que describió como la “decisión más importante" de su vida.
El deseo de Trump de reactivar el país activó las alarmas de los expertos en salud, que advirtieron que hacerlo demasiado pronto podría provocar un repunte de muertes que socavaría los esfuerzos de distanciamiento que han logrado relentizar las muertes y los afectados.
Aunque “existen dos caras en cada argumento, no haremos nada hasta que sepamos que este país va a estar sano. No queremos volver al inicio y comenzar de nuevo”, añadió.
Pese a que el creciente número de víctimas mortales es “horrible”, Trump dijo que “se está haciendo grandes progresos”.
“En medio de esta pena y dolor, estamos viendo claros signos de que nuestra agresiva estrategia está salvando incontables vidas”, dijo señalando a los modelos que ahora prevén menos muertos de los anticipados inicialmente para el país.
