Santo Domingo, República Dominicana.- Acción Empresarial por la Educación (EDUCA) consideró que el gobierno electo tiene entre sus manos la oportunidad de fortalecer en el ámbito educativo, la conducta de civilidad, institucionalidad y robustez de las estructuras democráticas que exhibió el país en el pasado reciente, dando continuidad a los avances y estrategias sistemáticas de metodología, programas y técnicas docentes y de aprendizaje, que vienen desarrollando las actuales autoridades del sistema.
En ese contexto, sugiere que la administración entrante transmita certezas y estabilidad, a fin de que los funcionarios del sistema continúen cumpliendo con el ejercicio de sus funciones, tal y como se ha venido haciendo hasta el momento,” con su lealtad personal y profesional con el Estado dominicano y no con el gobierno de turno”.
“De igual manera, se hace necesario refrendar la cultura del mérito y del esfuerzo como único canal para crecer y desarrollarse en el servicio público, pues tal como se plantea en el Pacto Nacional para la Reforma Educativa, vigente desde 2014, la instalación de una cultura de la evaluación y la adopción de procesos meritocráticos constituyen la única llave de crecimiento personal en la carrera administrativa y docente”.
Dichos señalamientos fueron enunciados por el director ejecutivo de Educa, Darwin Caraballo, como parte del análisis Blindar a la educación – parte II- Ante los atropellos de la vieja política, que recoge una Nota de Trabajo institucional, instrumento informativo que utiliza el equipo técnico de Educa, para divulgar sus investigaciones sobre los temas vinculados a la educación.
A juicio de Caraballo, el Ministerio de Educación (MINERD) -como ocurre en gran parte del Estado dominicano- se ha profesionalizado y fortalecido, lo que le entiende ha permitido contar con uno de los equipos más comprometidos y profesionales en materia presupuestaria, supervisión, evaluación, investigación, entre otros, cuyo talento es deseable mantener.
“Como muestra tenemos el caso de los 18 directores regionales y 122 directores distritales que hoy ocupan sus cargos como consecuencia de un proceso competitivo de oposición, diáfano, seleccionados entre más de 2500 candidatos y refrendados por la Ordenanza del Consejo Nacional de Educación, máximo órgano de decisión y definición de política educativa según lo establecido por la Ley 66’97”, apuntala Caraballo.
Añadiendo a continuación “sabido es que hay grupúsculos enquistados en todos los sectores de la sociedad, y opciones políticas que se resisten al cambio y que ven al Estado como un botín del cual hay que repartir para beneficio propio, siendo esos mismos grupos aislados que presionan y amedrentan a funcionarios actuales con su remoción inminente, como les está ocurriendo por estos días a los directores regionales y distritales”.
No obstante, refiere el ejecutivo de Educa que resulta afortunado el hecho de que el presidente electo, y el Ministro de Educación designado, hayan manifestado compromiso con la institucionalidad, a través de argumentos que plantean su vocación de servicio, el respeto a la institucionalidad, a las normas y a las leyes, y la firme convicción de hacer a la República más próspera y educada.
“Los tiempos difíciles requieren de acciones a la altura de las circunstancias de todos los involucrados, y como suele reiterar Samuel A. Conde, el presidente de EDUCA, este es tiempo de enfatizar en todo aquello que une a los dominicanos, más que en las pequeñas cosas que los separan”, enfatizó finalmente Darwin Caraballo.