Líderes mundiales expresaron hoy su solidaridad con Ecuador tras el seísmo de magnitud 7,8 en la escala abierta de Richter, ocurrido anoche en la zona norte costera del país suramericano y que dejó al menos 235 muertos y 1.557 heridos además de daños materiales, aún sin evaluar.
El presidente ruso, Vladímir Putin, transmitió sus condolencias mediante un telegrama remitido a su homólogo ecuatoriano, Rafael Correa, y deseó una "pronta recuperación" de los heridos.
"En Rusia compartimos el dolor y el pesar de aquellos que perdieron a familiares y seres queridos como resultado de esa catástrofe y esperamos una pronta recuperación de todos los afectados", señala el texto, según informó el Kremlin.
También el secretario de Estado estadounidense, John Kerry, lamentó, vía Twitter, los efectos del terremoto en Ecuador y ofreció la ayuda de su país en los trabajos de reconstrucción tras el mismo.
"Mis más sentidas condolencias a las víctimas del terremoto en Ecuador. Estados Unidos está preparado para asistir y apoyar al pueblo ecuatoriano en este difícil momento", dijo Kerry en su tuit.
Tras el desastre, el Gobierno ecuatoriano declaró el estado de emergencia en las provincias de Esmeraldas, Manabí, Guayas, Santo Domingo de los Tsáchilas, Los Ríos y Santa Elena, así como el estado de excepción en todo el territorio nacional.
El papa Francisco tuvo hoy, tras su rezo dominical, unas palabras para las víctimas del "violento terremoto que ha golpeado Ecuador" e invocó "la ayuda de Dios y de los hermanos" para que otorgue a los afectados "fuerza y apoyo".
En España, los monarcas Felipe VI y Letizia enviaron un mensaje a Correa para trasladarle su "pésame por las víctimas y solidaridad al pueblo ecuatoriano", según informaron fuentes de la Casa del Rey.
Por su parte, el presidente del Gobierno español en funciones, Mariano Rajoy, hizo público su "ofrecimiento de ayuda" a Ecuador que, aseguró, "ya está en marcha".
También Francia mostró su apoyo al país suramericano, como reflejó el comunicado de su ministro de Asuntos Exteriores, Jean-Marc Ayrault: "En esta terrible prueba, Francia es plenamente solidaria con Ecuador".
El secretario general de la Organización para la Liberación de Palestina (OLP), Saeb Erekat, manifestó que los palestinos rezan "desde Tierra Santa por las víctimas, sus familiares y la recuperación del país" y ofreció a las "autoridades del hermano país" su asistencia.
La región latinoamericana manifestó al instante su solidaridad con Ecuador.
El secretario general de Unasur, Ernesto Samper, así como los presidentes de Bolivia, Colombia, Costa Rica, Perú, Panamá, Paraguay, México y Venezuela expresaron su apoyo al país vecino.
"Mi solidaridad con las víctimas" y con el presidente de Ecuador, Rafael Correa, escribió Samper en Twitter y recomendó a la población "mucha calma".
"Somos de la familia de la solidaridad. Si en algún tema podemos expresar nuestra solidaridad, estamos aquí, hermano Rafael (Correa, presidente de Ecuador)", fue el cercano mensaje dedicado en rueda de prensa por el mandatario boliviano, Evo Morales, a su homólogo, con quien había mantenido este fin de semana un encuentro en Roma.
Previamente, en su recién estrenada cuenta de Twitter, había escrito: "Al hermano @mashirafael (Rafael Correa) y su valeroso pueblo ecuatoriano toda nuestra solidaridad. Estamos a su lado".
"Toda nuestra solidaridad con Ecuador", escribió el presidente colombiano, Juan Manuel Santos, en la misma red social.
Idéntico canal eligió el presidente de Perú, Ollanta Humala, quien ofreció "solidaridad y preocupación con el hermano pueblo de Ecuador" y su "disposición para brindar el apoyo necesario".
En parecidos términos se expresó el presidente panameño, Juan Carlos Varela, envió al pueblo de Ecuador su "profunda solidaridad en este momento de dificultad".
El venezolano Nicolás Maduro dijo que en su país están "listos para activar el apoyo que sea necesario"; el paraguayo Horacio Cartes envió sus "condolencias a los familiares de las víctimas"; el mexicano Enrique Peña Nieto mostró su dolor por "las lamentables pérdidas humanas y materiales causadas"; y el costarricense Luis Guillermo Solís expresó una "palabra de aliento" hacia Ecuador.
El Gobierno de Brasil, envuelto hoy en una tensa jornada por la celebración de la sesión parlamentaria que podría desembocar en la destitución de la presidenta, Dilma Rousseff, expresó su "consternación" por el seísmo mediante un comunicado de su Ministerio de Asuntos Exteriores.
También el Ejecutivo argentino, por medio de su Cancillería, transmitió sus "condolencias y solidaridad al hermano pueblo".
El terremoto se produjo a las 18.58 hora local del sábado (23.58 GMT) entre los balnearios costeros de Cojimíes y de Pedernales (norte), en la provincia de Manabí y colindante con la vecina Esmeraldas, que también ha sentido el impacto de las réplicas.
Tras el desastre, el Gobierno ecuatoriano declaró el estado de emergencia en las provincias de Esmeraldas, Manabí, Guayas, Santo Domingo de los Tsáchilas, Los Ríos y Santa Elena, así como el estado de excepción en todo el territorio nacional. EFE