SANTO DOMINGO, República Dominicana.- El huracán Doria tiene vientos máximos sostenidos de hasta 120 millas por hora (195 km/h), según el boletín más reciente del Centro Nacional de Huracanes de EEUU, que si bien son menores a los de las horas previas igual es una velocidad muy destructiva. Ha pasado de nivel 5 a categoría 3, lo que en la práctica es poco.

Los expertos anticipan que el núcleo de la bestial tormenta continuará afectando la isla Grand Bahama mientras se mueve lenta y peligrosamente cerca de la península de la Florida. Así se mantendrá durante este martes y mañana miércoles.

Ya en Grand Bahama es el más potente ciclón que haya tocado tierra desde que se llevan registros y lo mismo en la vecina isla Ábaco.El huracán Allen de 1980 tuvo vientos máximos sostenidos de 305 kilómetros por hora; por ello encabeza la lista de los ciclones tropicales más fuertes del Atlántico norte desde 1950. Resulta queDorian, que el 1 de septiembre registró vientos de 295 kilómetros por hora, se ha colado en el segundo lugar de los peores huracanes. Empata con Gilbert (1988) y Wilma (2005).

EFE/EPA/NASA

Ya son cuatro los años consecutivos con al menos un huracán de categoría 5 en la cuenca atlántica: 2016 (Matthew); 2017 (Irma y María); 2018 (Michael); 2019 (Dorian).Se espera que se sitúe muy cerca de la costa de Florida a partir de este martes por la noche.

En su boletín de las 8.00 horas de este martes el Centro Nacional de Huracanes (NHC), que sigue considerando a Dorian un huracán "extremadamente peligroso", lo sitúa a una 40 millas (70 km) al noreste de Freeport, en la isla Gran Bahama, y a 110 millas (120 km) de West Palm Beach, en la costa este de Florida.

La velocidad sigue siendo de una milla por hora (2 km/h), la misma de este lunes cuando se abatió sobre Gran Bahama, que sigue afectada por la parte sur del ojo de Dorian.

Sin embargo, según el pronóstico del NHC, Dorian empezará hoy por la tarde a ir más rápido cuando avance en dirección noroeste o nor-noroeste. El miércoles por la tarde virará hacia el norte y el jueves por la mañana hacia el nor-noreste.

De acuerdo con el boletín, Dorian pasará muy cerca de la costa de Florida y después por las de Georgia y Carolina del Sur, lo que significa que las bandas exteriores del huracán se sentirán en tierra.

En Carolina del Norte, adonde se espera que llegue a últimas horas del jueves, existe la posibilidad de que llegue a tocar tierra, de acuerdo con ese patrón de trayectoria.

Los vientos con fuerza de huracán de Dorian se extienden hasta 45 millas (75 km) de su centro y los de tormenta tropical hasta 160 millas (260 km).El NHC emitió una serie de avisos y ordenes de vigilancia para todos los territorios estadounidenses bajo la amenaza de Dorian.

Los efectos en tierra van desde vientos, marejada ciclónica con subida del mar hasta 10 a 15 pies por encima de lo normal en Gran Bahama, oleaje, inundaciones, lluvia intensa, resaca y tornados.

Con categoría 5, la máxima de la escala Saffir-Simpson, Dorian impactó el pasado domingo sobre las islas Ábaco, en el archipiélago de Bahamas, donde ha dejado en principio unas 13 mil viviendas destruidas, según estimaciones de la Cruz Roja.

El primer ministro de Bahamas, Hubert Minnis, informó este lunes de que al menos cinco personas fallecieron en las Ábaco a causa del huracán, según datos provisionales, que no incluyen los efecros en Gran Bahama, isla que el lunes fue golpeada por el huracán.

El cambio climático se manifiesta en la fuerza de un huracán, según la OMM

Una vez más el cambio climático se está manifestando en la fuerza adquirida por un huracán, el Dorian, cuya capacidad destructora se ha reforzado por el aumento del nivel del mar y de su temperatura, explicó hoy ewn Ginebra la Organización Meteorológica Mundial (OMM).

"Hay muchas investigaciones en torno a la intensidad (de los huracanes) y un mensaje que se puede extraer es que el cambio climático no necesariamente aumenta el número de huracanes, pero sí aquellos de gran intensidad, como Dorian", dijo la portavoz de la organización, Clare Nullis.

El huracán Dorian arrasó en los dos últimos días parte de las Bahamas dejando hasta el momento cinco muertos y daños incalculables, mientras prosigue con menor intensidad su camino hacia la costa de Florida, en Estados Unidos.

En una comparecencia ante la prensa, Nullis subrayó que el impacto de los huracanes en los territorios de baja altura, como Bahamas, se ha incrementado por el aumento del nivel de mar, lo que los expone a mayores inundaciones.

"El aumento del nivel del mar es una de las señales claves del cambio climático y los pequeños países insulares del Caribe, así como del Pacífico, están en la línea de frente", agregó.

El segundo factor que potencia directamente los huracanes es la temperatura del mar: "Como consecuencia del cambio climático, los océanos se calientan y los huracanes se alimentan del calor", dijo.

La OMM, que recibe los datos que maneja de los principales organismos meteorológicos del mundo, confirmó que en las últimas horas la intensidad de Dorian ha descendido a la categoría 3, a pesar de lo cual las lluvias y los vientos (195 kilómetros por hora) que provoca siguen teniendo efectos devastadores.

Nullis también aclaró que si este huracán ha provocado tantos daños ha sido por su tendencia a mantenerse estacionario, lo que hace que el impacto de vientos, lluvia y oleajes que provoca se concentren en una sola área.

"Normalmente, los huracanes se mueven rápido, pero parece que éste se queda bastante estático sobre Gran Bahama (Bahamas), que aparece como un sandwich entre sistemas de alta presión", comentó.

La temporada de huracanes en el Atlántico, que normalmente alcanza su pico en torno al 10 de septiembre, había sido tranquila hasta la llegada de Dorian, demostrando que hace falta solo un huracán para devastar un país, destruir su economía y los medios de vida de su pueblo.

En una declaración por separado en Ginebra, un representante de la Oficina de la ONU para la Prevención de Desastres señaló que Dorian "cristaliza la amenaza que pende sobre las pequeñas islas-país por la emergencia climática".

"Este es el cuarto año consecutivos en el que vemos huracanes extremadamente devastadores en el Atlántico y esto no puede disociarse del hecho de que los últimos cinco años han sido los más calientes registrados debido a que siguen aumentando los gases de efecto invernadero en la atmósfera", explicó Denis McClean.

Bahamas se ha visto afectada en los últimos años por otros dos huracanes de gran intensidad (Matthew e Irma), que causaron pérdidas por 820 millones de dólares. EFE