“Donde come uno, comen dos y tres”, dice abuela de dominicano número 10 millones

SANTO DOMINGO, República Dominicana.- A pesar de que vive del lavar y planchar la ropa de los vecinos y conocidos, Altagracia Jorge le da la bienvenida con regocijo a su primer nieto, Edward Enmanuel Gil Lebrón, el cual se convirtió en el dominicano número 10 millones del país.

“Donde comen uno, comen dos y tres”, manifestó Altagracia de apenas 36 años de edad y madre de Dulce Carolina Lebrón, quien con una mezcla de sorpresa y simpatía observa a su retoño.

Residente del sector 24 de Abril, la abuela de Edward tiene dos pequeños más de 10 y 13 años de edad, uno de ellos lleva un tratamiento médico debido a un problema cardiaco que le aqueja.

Madre soltera y sin profesión alguna, dice a pesar de que no siempre tiene para alimentar a sus hijos la llegada de Edward le impulsa a seguir trabajando para obtener algo mejor.

“Cuando Carolina me dijo que estaba embarazada me preocupé un poco porque ella es una niña, pero pensé que ya estaba aquí y que hay que echar para adelante”, argumenta Altagracia.

Algo acongojada aún, Dulce Carolina descansa en una silla al lado de la cama donde reposa su criatura. Ella afirma que todavía no cree sea madre con apenas 16 años de edad, pero manifiesta se hará cargo de la crianza de su bebe y lo hará un hombre de bien.

Al igual que su madre y muchas mujeres dominicanas, es una madre soltera .

Cursa el segundo de bachillerato en un liceo nocturno, debido a que por las mañanas trabaja con su tío para ayudar a su madre. “Voy por las mañanas y en las tardes no hago nada más, hasta que me iba al liceo en la noche”.

La menor de apenas 16 años, luce una bata color blanco y detalles verdes, manifiesta ha sido entrevistada por docenas de medios de comunicación debido a la fama que ha adquirido su bebe.

Empero, a pesar de la fama de su bebe réplica en voz baja que su condición económica no será diferente.

Expresa que el padre de su hijo, al cual conoció mientras trabajaba con su tío, solo tiene 22 años y no terminó la secundaria. “Él trabaja y dice se va a hacer cargo de Edward”.

Los jóvenes sostuvieron una relación de apenas un año, de la cual su madre tenía conocimiento, pero no de la magnitud de esta. “Yo sabía de la relación con el joven, pero no contenía intimidad lo que me sorprendió”, dice Altagracia.

El bebé de la adolescente nació mediante procedimiento de cesárea y se encuentran en perfecto estado de salud.

“Tenemos que asumir que nuestros niños están teniendo relaciones sexuales”

Y es que aunque esto le causó sorpresa a la madre de Dulce, la gineco-obstetra del Hospital Materno Nuestra Señora de La Altagracia, Guadalupe Cornielle, externó ser un motivo de preocupación el que la mayoría de nacimientos en los últimos años sean de madres adolescentes.

“Tenemos que asumir que nuestros niños están teniendo relaciones sexuales precozmente, entonces lo que no queremos es que se paren de estudiar o se compliquen con un embarazo”, expresó la especialista.
Cornielle argumentó que se debe prestar mayor atención a estos casos por parte de las autoridades gubernamentales, como por los padres y madres dominicanos.

Destacó es necesario que los y las adolescentes tengan acceso a los medios de planificación o anticonceptivos para evitar el incremento de la pobreza en la República Dominicana.

“Educar a la sociedad desde el punto de vista madre y padre, para que la información le llegue a los adolescentes”, recalcó.

Aseguró que aunque los médicos se encargan de planificar sexualmente a los menores, estos abandonan el plan de anticonceptivos y a los pocos meses tienen otro hijo. “Después del desembarazo ella es citada en ocho días a consulta puerperio, donde se le suministra un método anticonceptivo y se le da seguimiento cada tres o cuatro meses; aunque esto en muchos casos no resulta”.

La médico concluye que a pesar de lo antes expuesto significa un buen augurio el hecho de que en dicha Maternidad haya nacido el dominicano numero 10 millones, después de tantos recién nacidos fallecidos y complicaciones de partos, así como la situación de infraestructura y la falta de equipos en que se encuentra el centro de salud más solicitado por las mujeres pobres del país.