SANTO DOMINGO, República Dominicana.- El conjunto de organizaciones que integran la Plataforma Dominicanos por Derecho, solicitó al Estado dominicano ofrecer garantías para evitar la expulsión de ciudadanos dominicanos indocumentados o con dificultades de acceder a su documentación de identidad, ante el ampliamente anunciado proceso de repatriación de personas extranjeras en situación migratoria irregular.

El colectivo reiteró durante rueda de prensa realizada este martes 30, que no se opone a ninguna medida migratoria que se implemente respetando la dignidad humana, derechos fundamentales, tratados internacionales y leyes nacionales que rigen la materia, pero que “bajo ningún concepto es aceptable que el Estado evada la responsabilidad de dar una solución efectiva a la situación de las personas desnacionalizadas pretendiendo  equiparar  a un dominicano no documentado  con una persona migrante”.

“La problemática de la desnacionalización se agravaría con el desplazamiento forzoso de dominicanos/as  no inscritos en el registro civil  que  no pudieron acogerse a la  medida que  les planteaba asumirse como extranjeros para tener acceso a documentos de identidad”, explicó el abogado Juan Manuel Morel, quien fungió como vocero de la plataforma en el encuentro con los medios efectuado en el Colegio Dominicano de Periodistas.

Las organizaciones efectuaron un llamado de atención sobre el peligro de separar miles de familias con hijos dominicanos por la situación de documentación de sus miembros, así como mantener en un estado de vigilancia por parte de organismos de investigación y amenaza de operativos a comunidades afrodescendientes “ya de por si excluidas, empobrecidas y estigmatizadas”.

Exhortaron a las autoridades gubernamentales a  socializar el protocolo, logística y criterios a utilizar  en el  proceso de repatriación de personas  migrantes en situación irregular y que se permita a  las organizaciones dominicanas ser testigo de su adecuada implementación.

Sobre el llamado de la JCE

Dominicanos por Derecho externó además su temor de que no se concreticen en la práctica  las informaciones emitidas por la Junta Central Electoral (JCE) sobre una supuesta solución masiva a la problemática del bloqueo de acceso a documentos de identidad, limitándose  nueva vez a generar un impacto mediático para reducir la presión sobre la problemática de dominicanas y dominicanos desnacionalizados.

Señaló que pese a la promulgación de la ley 169-14 hace más de un año y las diversas convocatorias a las personas afectadas para dar "solución" a sus casos, afirman que la JCE mantiene en el “limbo jurídico” a miles dominicanos y sus descendientes, además de que bloquea sus documentos de identidad al no colocarlos en el sistema automatizado de registro, ha creado procesos diferenciados que incluye la investigación de familiares, transcribe sus actas a un nuevo libro generando un subregistro a partir del origen y la situación migratoria de los padres, medida segregacionista que convierte a esta población en blanco de futuras  acciones desaprensivas.

“El bloqueo injustificado de documentos en el sistema impide a miles de personas a realizar con normalidad actividades de la vida civil y deja abierta la posibilidad de que sean impedidas de ejercer su derecho al voto, lo que ocasionaría serios cuestionamientos al proceso electoral que se avecina”.

Aseguraron que el llamado de la JCE es confuso porque enmarca  la  ley 169-14 dentro del conjunto de medidas destinadas a regularizar  la población migrante, lo que  desconoce  el derecho a la nacionalidad de las y los afectados, promueve  la idea de la existencia de un grupo poblacional  que es “dominicano por error”, crea animadversión hacia  las  personas descendientes de migrantes.

Lamentaron que en 2015 un dominicano negro, residente en zona bateyera o en comunidades de gran presencia afrodescendiente, con rasgos físicos o apellido que pueda ser asumido como extranjeros deba agotar procedimientos distintos al del resto de los dominicanos para obtener su documentación.

Exigieron al gobierno  evitar que este nuevo llamado de la JCE  se convierta en otro fiasco y   proteger a sus ciudadanos/as de la negligencia de funcionarios públicos.

"Es  momento de asumir un compromiso nacional  que ponga fin al bochornoso capítulo de  discriminación institucional hacia dominicanos y dominicanas por el origen nacional de sus padres,  color de piel, ubicación geográfica, apellidos, rasgos físicos y situación de documentación, instaurado por la JCE desde el 2007. La Junta Central Electoral debe acatar de una vez y por todas la ley que devuelve  el acceso a sus documentos de identidad a los dominicanos/as descendientes de migrantes inscritos en el registro civil".

También Cristiana Luis Francisca del Movimiento de Mujeres Dominico-Haitianas, Elena Lora del Movimiento Reconoci.do, Maribel Núñez de Acción Afro-Dominciana,  la activista de la diáspora dominicana en New York Miriam Mejía, así como también Roudy Joseph de la Red de Encuentro Dominico-Haitiana Jaques Viau formaron parte del equipo de voceros de la plataforma.