SANTO DOMINGO, República Dominicana.- El director del Centro de Formación y Acción Social y Agraria (CEFASA) y del Centro Bellarmino, Padre Roberto Guzmán, definió este viernes como peligrosa y absurda la denuncia hecha contra los periodistas Huchi Lora, Juan Bolívar Díaz y la entidad no gubernamental Participación Ciudadana, a raíz de las críticas realizadas por los comunicadores al fallo 168-13 del Tribunal Constitucional.

El sacerdote expresó en una carta abierta en defensa de los profesionales de la comunicación y Participación Ciudadana que la persecución es un intento de silenciar las voces disidentes que se denuncian lo que consideró como una aberración jurídica, violatoria de los derechos fundamentales de los afectados.

Guzmán resaltó su preocupación ante los recientes actos contrarios a la integridad personal y física de aquellos quienes formulan una opinión incompatible con lo presentado en la sentencia.

Indicó que la última medida adoptada frente a los periodistas es “más peligrosa aún”, en referencia a las acciones de denuncia formal contra dos personas y una institución, “por el simple hecho de que piensan y plantean ideas diferentes a las que ellos tienen”.

“Esta acción es una muestra de lo débil que está nuestra democracia y una confirmación de lo intransigente de este grupo, que se denomina Defensores de la Patria”, dijo.

En ese sentido, director de CEFASA señaló que el uso de la fuerza y la descalificación de grupos “intolerantes” es “propio de los que no tienen la razón”.

Sobre la Sentencia del TC, consideró que la misma despoja de la nacionalidad a los dominicanos hijos de extranjeros nacidos en el país, además de dividir la nación entre los que exponen que no aplicar el fallo atenta contra la soberanía y aquellos quienes plantean que de aplicarse se violarían los derechos fundamentales de los afectados.

“Una defensa de este tipo no nos conviene como País, porque incita a la violencia, divide y no plantea salida a la situación, este tipo de acción hace más daño que bien a nuestra Patria”.

Por último, el clérigo resaltó su rechazo las presiones y amenazas contra quienes cuestionan el fallo, y aseguró que continuará en pie de lucha, respetando el pensamiento del contrario, pero intentando “desenmascarar sus intenciones ocultas”.